Por Claudia Bolaños
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El precio de la mariguana y de la amapola cayó en el campo ante el avance de las drogas sintéticas, sobre todo el cristal cuya demanda crece a pasos agigantados en el mercado negro; ante ello, los campesinos que se dedican a ese cultivo de manera ilegal en México se encuentran preocupados, pues sus ingresos se han disminuido hasta en un 40 por ciento.
La solución para varias personas metidas en el tráfico de drogas es embodegar la hierba para especular con su precio y elevarlo, se indicó a ContraRéplica en consultas realizadas a varios conocedores del agro en diversas entidades del país.
A la fecha, la amapola se compra a los campesinos entre los 20 y 25 mil pesos, cuanto antes se asimilaba a la producción de aguacate, que es uno de los mejor pagados en la siembra, a 50 mil pesos la tonelada, indicaron miembros de la Unión de Trabajadores Agrícolas (UNTA) y del Frente Único del Campo.
La mariguana es la que más ha descendido pagándose entre los 8 y 12 mil pesos por parcela, por lo que también su producción decayó, se indicó.
“El precio de la mariguana y de la amapola bajo muchísimo y su siembra no es tan costeable. Prácticamente sí se sigue produciendo, pero en menor cantidad”, indicaron.
Lo anterior es debido a que la droga conocida como cristal se ha impuesto en “el gusto” de las personas adictas de la unión americana, y con crecimiento al alza en México, al ser una droga altamente adictiva y barata.
En consultas realizadas, se conoció que una dosis puede costar de 50 pesos a 100 pesos, mientras que un cigarro de mariguana generalmente cuesta de 30 a 70 pesos, dependiendo de la calidad, pero los efectos de la primera son más rápidos y fuertes, según información recabada por este diario.
Según informes del Consejo de Integración Juvenil el consumo del cristal ha aumentado 500 por ciento en los últimos cuatro años.
El National Institute on Drug Abuse de Estados Unidos (Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas), indica que ésta es una metanfetamina y poderoso estimulante y sumamente adictivo que afecta el sistema nervioso central.
Esta droga tiene forma de aspecto de fragmentos de vidrio o piedras blancoazuladas brillantes, por lo que también es conocida también como speed, blue y ice.