Con el propósito de mantener el estatus de país libre de influenza aviar de alta patogenicidad (IAAP) AH5N1, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) hace un llamado a las y los productores avícolas a reforzar las medidas de bioseguridad en sus granjas, así como unidades de traspatio y notificar inmediatamente a la autoridad sanitaria cualquier anomalía que observen en sus animales.
México se mantiene hasta el momento como país libre de la enfermedad, ya que el último brote de IIAP AH5N1 en aves comerciales se presentó en octubre del 2023, por lo que el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) opera acciones estratégicas, como el programa de verificación de medidas de bioseguridad en granjas comerciales y el control de la movilización, las cuales han fortalecido la sanidad avícola de nuestro país.
Las medidas han sido exitosas, ya que durante 2024 no se han confirmado casos positivos en granjas comerciales. En tanto que en los Estados Unidos de América, en el mismo periodo, se han reportado 73 focos en aves comerciales y 49 en traspatios, lo que ha obligado a sacrificar más de 11 millones de aves.
Las acciones realizadas por el Senasica han protegido el abasto nacional y la seguridad alimentaria de las y los mexicanos, ya que la principal fuente de proteína de origen animal proviene de las producciones avícolas, con un consumo anual per cápita de carne de pollo de 37.3 kilogramos y un consumo anual per cápita de huevo de 24.4 kilogramos.
Es importante precisar que durante la temporada otoño-invierno, especialistas de la Dirección de la Comisión México- Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y otras Enfermedades de los Animales (CPA) del Senasica han confirmado casos de IAAP AH5N1 en aves silvestres, sin embargo, esto no afecta el estatus de país libre. Su detección ha sido notificada a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).
La circulación del virus en ambientes silvestres es común durante esta temporada, derivado de la migración de aves provenientes de Estados Unidos y Canadá hacia el centro y sur del continente americano. Por ello, el Senasica mantiene activo su sistema de vigilancia epidemiológica, con monitoreo para influenza aviar en granjas comerciales, traspatios y aves silvestres para detectar de manera oportuna cualquier caso.
La Dirección General de Salud Animal del Senasica subrayó que los patos y los gansos migratorios no visitan las granjas avícolas, no obstante, en los humedales –donde pernoctan para alimentarse y descansar– pueden convivir con otras aves residentes que pueden contagiarse y visitar las granjas avícolas que no tienen medidas de protección contra ellas, como las mallas pajareras.
Es por ello, que la bioseguridad de las unidades productivas es la mejor protección contra la influenza aviar, y es responsabilidad del avicultor proteger sus parvadas.
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