El jefe de gobierno de Ontario, Doug Ford, generó controversia al proponer que México sea excluido del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Ford expresó que México actúa como una "puerta trasera" para productos chinos que afectan las industrias de Canadá y Estados Unidos, especialmente en sectores clave como el automotriz.
"El comercio libre debe ser justo. Desde que se firmó el T-MEC, México se ha convertido en un canal para autos, piezas y otros productos chinos que perjudican a los trabajadores canadienses y estadounidenses", señaló Ford, destacando la necesidad de igualar aranceles impuestos a productos chinos por Canadá y EE. UU. Además, sugirió priorizar un acuerdo comercial bilateral entre Canadá y Estados Unidos, dejando a México fuera de la ecuación.
La postura de Ford surge en medio de tensiones comerciales exacerbadas por la reciente amenaza de Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, de imponer aranceles de hasta el 200% a bienes de manufactura china exportados desde México. Este contexto ha llevado al ministro canadiense de Industria, François-Philippe Champagne, a reafirmar que Canadá protegerá sus intereses económicos, resaltando la importancia de su relación con Estados Unidos.
Ontario, pieza clave en la industria automotriz canadiense con más de 125,000 empleos directos, teme que los productos chinos desplacen su producción local. Ford calificó la situación como una amenaza directa a la economía de su provincia, que contribuye significativamente al PIB nacional.
En respuesta, el primer ministro Justin Trudeau planea reunirse con líderes provinciales para coordinar una estrategia frente a las tensiones. Mientras tanto, la renegociación del T-MEC en 2026 promete ser un tema de alta sensibilidad para las tres naciones involucradas.
Foto por AFP