Por Redacción
El virólogo y profesor español Raúl Ortiz de Lejarazu advirtió a través de su perfil en Twitter del peligro que suponen cierto tipo de conductas relajadas frente al coronavirus, que seguirán favoreciendo su propagación a pesar de que se imponga el uso generalizado de mascarillas.
Se trata de lo que el propio doctor ha llamado las seis “B”, es decir, los seis tipos de reuniones en las que el virus se contagia con más facilidad, a un mayor número de personas y en menos tiempo, y todas ellas empiezan por la misma letra.
Según el experto, en “bodas, bautizos, banquetes, barbacoas, bares y botellones (reuniones masivas de jóvenes)” las personas se olvidan de las medidas sanitarias básicas para combatir el coronavirus, por lo que destacó la necesidad de llevar la mascarilla también en ese tipo de situaciones o imponer “alguna legislación” para regularlas.
Lejarazu, que se presenta a sí mismo en Twitter como un “fanático de los virus”, en especial “de la gripe y otros virus respiratorios”, mantiene en la red social un perfil muy activo, que en los últimos días se ha dedicado especialmente a pedir “coherencia” en las normas y en las conductas destinadas a frenar el avance del coronavirus.
“1- Políticos celebrando sus triunfos sin mascarillas y abrazos con ella; 2-Bares y terrazas sin indicación de aforo ni distancia de seguridad; 3-celebraciones deportivas multitudinarias… Coherencia!!”, escribió Ortiz de Lejarazu en su cuenta de Twitter el pasado 13 de julio.
En un tuit anterior, el virólogo se refería únicamente a cuatro tipos de eventos, a cuatro “B”, en las que las aglomeraciones podrían ser peligrosas: bodas, bautizos, bares y bodegones. Luego añadiría los banquetes y las barbacoas.
“La obligación de llevar cubrebocas aunque haya distancia física amplia y suficiente y al aire libre no detendrá las aglomeraciones de funerales y las 4B (bodas, bautizos, bares y botellones); no protegerá de la transmisión por la higiene d manos ni ojos; despistará de otras medidas”, alertó el médico.
En cualquier caso, más allá del tamaño la lista, se entiende bien la idea general que quiere compartir el doctor: que de nada sirve el uso generalizado de mascarillas y el mantenimiento de distancias de seguridad, mientras este tipo de reuniones sociales más o menos multitudinarias se lleven a cabo sin la debida precaución.