En medio de tensiones geopolíticas, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, reafirmó su intención de alcanzar una paz “justa y duradera” con Rusia tras reunirse en París con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump. Este encuentro, facilitado por el mandatario francés Emmanuel Macron, se produjo en el Palacio del Elíseo, marcando un momento clave para Ucrania ante la incertidumbre sobre el futuro apoyo militar de Washington.
Trump, quien asumirá la presidencia en enero de 2025, señaló en una entrevista con la NBC que su administración "probablemente" reducirá la ayuda militar a Ucrania. "Es posible. Sí, probablemente, seguro", afirmó, destacando su escepticismo respecto al nivel actual de asistencia estadounidense. Este posicionamiento genera inquietud en Kiev, donde la ayuda de Estados Unidos ha sido fundamental para resistir la invasión rusa, que inició hace casi tres años.
Por su parte, Zelensky subrayó la importancia de garantizar una paz sostenible que impida a Rusia reactivar el conflicto en el futuro. Aunque ha suavizado su postura frente a concesiones territoriales, condicionó cualquier negociación a la obtención de garantías de seguridad por parte de la OTAN y el suministro continuo de armas occidentales. "Lo más importante es una paz justa y garantías de seguridad fuertes para Ucrania", expresó Zelensky en sus redes sociales.
En el marco de esta reunión, el presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció un nuevo paquete de ayuda militar de 988 millones de dólares para Ucrania, que incluye drones y sistemas de artillería. Mientras tanto, Moscú intensificó sus operaciones en el este de Ucrania, informando avances en la región de Donetsk.
Este diálogo trilateral también reveló profundas divergencias: mientras Zelensky busca una resolución que respete la soberanía ucraniana, Trump expresó su intención de alcanzar un acuerdo rápido si logra reelegirse. "Podría resolverlo en 24 horas", declaró sin proporcionar detalles sobre cómo lograría tal objetivo.
El Kremlin, por su parte, reiteró que cualquier negociación debe incluir la cesión de territorios ocupados por Rusia, una exigencia que Kiev ha rechazado rotundamente. Según Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, Ucrania continúa negándose a entablar conversaciones.
El panorama sigue siendo incierto, con el futuro de la asistencia occidental a Ucrania en juego y el conflicto extendiéndose en el tiempo, con pérdidas humanas significativas en ambos bandos. Las próximas decisiones políticas en Estados Unidos podrían redefinir el curso de la guerra y las posibilidades de alcanzar una paz sostenible.
Foto por AFP