“El fuego es mi nombre exacto”, nueva antología de Mario Bojórquez

Para Mario Bojórquez (Los Mochis, Sinaloa, 24 de marzo de 1968) el trabajo del poeta es un trabajo callado, silencioso, apartado de las personas que reclama rigurosidad, “que exige la propia poesía”.

Actualmente, sus poemas forman parte de la antología “El fuego es mi nombre exacto”, que es parte de la Colección Álamo la cual reúne, hasta el momento, a siete poetas como Héctor Carreto, Dana Gelinas, Marco Antonio Campos, Jaime Labastida, Gabriel Zaid, Eduardo Lizalde y al propio Bojórquez.

“Es una selección de Rogelio Guedea de todos mis libros publicados hasta ahora y es su selección, su manera de leer al igual que todos los otros títulos de la Colección Álamo. Es su selección de poesía mexicana, lo que cree él que vale la pena remarcar y volver a leer”, afirmó Bojórquez en entrevista.

“El fuego es mi nombre exacto” recopila poemas de Pájaros sueltos (1991); Los domésticos (1993); La mujer disuelta, Los Domésticos (1996); Pretzels (2005); El deseo postergado (2007); Y2K (2009); Hablar sombras (2013) y Memorial de Ayotzinapa (2016).

“Empieza efectivamente desde Pájaros sueltos; también incluye del libro que conocemos como Memorial de Ayotzinapa y que es lo más nuevo que he publicado en el año 2016”, sostuvo.

Fui contando las piedras del camino
una por una
todas
La piedra más alta
era la nube de tu sueño
el hueco de tu sueño
Yo lo supe
y fui contando las veces que el amor
nos abrió las puertas del destino.

Mario Bojórquez
El fuego es mi nombre exacto@rogelioguedea @lectorum pic.twitter.com/IRbOsjxdmt

— Mario Bojórquez (@casidadelodio) February 9, 2022

La obra de Bojórquez ha sido reeditada tanto en México como en Argentina, Colombia y España. También ha sido traducida al alemán, árabe, catalán, francés, inglés, kurdo, italiano, griego, rumano, ruso y portugués.

Esta nueva antología acoge su nombre del poema Brooklyn Bridge, en el que se puede leer: “Cada vez que digo agua, el agua vuelve viento, el viento fuego, el fuego mi nombre exacto pero mucho más pleno, y más desconocido”.

Pese a que Bojórquez es conocido en el mundo de la literatura, el también Premio Nacional de Poesía Aguascalientes 2007 no recomienda sus propios poemas, ya que considera que cada persona debe de llegar a la poesía a través de los sentimientos que evoca la propia lectura, sea quien sea el autor.

“A la poesía uno se acerca sin recomendaciones ¿cómo te acercas a la poesía? Primero es una lectura singular y puedes encontrar historias pero no están sustentadas necesariamente en la historia, tiene que ver con una noción lirica que es cómo siente uno algo, cómo piensa uno en una cosa, tiene que ver con el yo, quien lo inventa es Alquílico (Grecia, 712 a.C. - 664 a.C.)”, detalló.

Continuación de Memorial de Ayotzinapa

La pandemia Covid-19 no detuvo su trabajo como editor y traductor en Circulo de Poesía; sin embargo, durante 2020 y parte de 2021, Bojórquez pausó varios proyectos que tenía en puerta.

“La poesía está mirando mucho hacia adentro y quizá nos habíamos habituado a andar mucho en la calle. Cuando empezó esto yo les dije a mis compas: Bueno, ¿ahora qué haremos? Teníamos libros que habíamos presentado en la Feria de Minería. Había salido esta antología que reúne cuatro libros míos que se llama Memoria de lo vivido. Lo habíamos presentado en febrero y en marzo ya no pudimos salir”, aseveró.

Sostuvo que continuará con una nueva edición de Memorial de Ayotzinapa (2016), un poema documental que narra la desaparición forzada de los 43 normalistas en Iguala, Guerrero y que continuará en este 2022 con su tercera edición.

“Al tratarse de un poema documental como es el caso de Memorial de Ayotzinapa es un poema que se mueve, como en 2016 donde creíamos que habían pasado muchas cosas con la teoría que había más de 40 cuerpos y que en una noche o dos se habían incinerado otros cuerpos.

Luego habían llegado estos señores especialistas, forenses, del grupo argentino y dicen que ahí no hubo una quema de tales proporciones porque se necesitan ‘tantas’ toneladas de madera y aquí no hubo una quema de cuerpos como se cuenta. Luego empieza una discusión con respecto de las cenizas que aparecieron en el Río San Juan. Hoy sabemos que este señor (Tomás) Zerón, que es buscando en Israel, las mandó a sembrar. Sabemos muchas cosas y seguramente cada día tendremos más idea de lo que sucedió realmente”, aseveró el poeta.