Columnas
La realidad se vuelve a imponer y ante el creciente número de inmigrantes que siguen buscando ingresar y permanecer sin documentos en los Estados Unidos, Donald Trump está buscando a dónde enviarlos además de México.
El fin de semana pasado; Panamá y Bahamas rechazaron la iniciativa delpróximo presidente de los Estados Unidos de enviar a esas naciones a los migrantes que sean deportados. Los cancilleres de estos países señalaron…” que a la luz del Derecho Internacional no tenemos obligación de recibir deportados de otras nacionalidades que no sean la originarios de estos territorios. Deseamos mantener relaciones con Estados Unidos siempre en el marco del respeto mutuo”.
Lo cierto es que, mientras más se adentra Trump en el fenómeno migrante, seha dado cuenta de que además de México necesita encontrar otras naciones que reciban los aviones con inmigrantes expulsados.
A partir del 20 de enero minutos después de que Donald Trump asuma la presidencia estadounidense, los inmigrantes: venezolanos, chinos, guatemaltecos, hondureños y africanos que se encuentran en los centros de detención serán deportados inmediatamente, aunque no se conoce su destino final.
La cadena televisiva NBC News informó que el equipo de transición ya inició conversaciones con representantes de cuatro países para que reciban estos inmigrantes expulsados por los Estados Unidos: Granada, Islas Turcas. Bahamas y Panamá.
Uno de los temas recurrentes desde la primera campaña de Trump ha sido la detención y deportación de migrantes, ¿cómo? no lo ha mencionado sólo ha dicho que vendrán deportaciones masivas por tierra y aire. Todo esto en respuesta a la petición de sus fanáticos.
Bien vale recordar que Donald Trump ha manifestado su intención de declararuna emergencia nacional y, utilizar al ejército estadounidense de alguna manera para ayudar en sus planes de deportaciones masivas de inmigrantes e incluso utilizar activos militares para enfrentarla, la vía, no se ha conocidotodavía para hacer esa deportación masiva.
El tema migratorio ha formado parte de la narrativa de los presidentes desde por lo menos los años ochenta, y desde entonces, hay que reconocerlo, no se han dado soluciones de fondo, todas han transitado por lo cosmético.
El Congreso, ha otorgado a los presidentes amplios poderes para declarar emergencias nacionales a su discreción desbloqueando poderes de reserva que incluyen, redirigir fondos que los legisladores habían destinado para otros fines. Por ejemplo, durante su primer mandato Trump invocó este poder para gastar más en un muro fronterizo de lo que el Congreso había estado dispuesto a autorizar.
En periódico The New York Times publicó, que el principal asesor de Trump en política de inmigración, Stephen Miller, dijo que los fondos militares se utilizarían para construir instalaciones de detención y para desarrollar acciones de deportación.
@ncar7