Claudia Bolaños
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reiteró el papel crucial de los migrantes mexicanos en Estados Unidos, calificándolos como "héroes y heroínas de la patria".
Durante el evento Programas para el Binestar en Tamaulipas, la mandataria reivindicó la labor de los trabajadores mexicanos.
Estando en esta ciudad fronteriza es indispensable hablar de nuestra relación con nuestros vecinos, con Estados Unidos, y de nuestros hermanos y hermanas, paisanos y paisanas, que viven del otro lado de la frontera, héroes y heroínas de la patria, los paisanos y paisanas que viven en Estados Unidos.
Sheinbaum enfatizó la importancia de los mexicanos en sectores como el campo, la construcción, las fábricas e incluso en áreas de alta especialización técnica y científica, destacando que, sin ellos, "no llegaría alimento a la mesa de los norteamericanos".
La mandataria aprovechó el espacio para abogar por una relación de respeto y cooperación entre México y Estados Unidos, especialmente en el contexto de las amenazas de deportación masiva emitidas por el expresidente Donald Trump. Sheinbaum insistió en que México está dispuesto a colaborar en temas críticos como el tráfico de drogas, pero "sin subordinación".
La presidenta reconoció que el problema del consumo de fentanilo en Estados Unidos está vinculado con la violencia en México. Por ello, propuso trabajar en conjunto para promover la paz y la prosperidad en la región fronteriza, una de las más dinámicas del mundo, con un intercambio diario de 70 mil tractocamiones, un millón de personas y 40 mil vehículos.
En su discurso, Sheinbaum también destacó la relevancia del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) como una herramienta clave para enfrentar los retos económicos impuestos por la competencia con China. Subrayó que América del Norte debe consolidarse como una región más fuerte, complementaria y autosuficiente, generando el 30% del PIB mundial y buscando liderar la economía global.
Además, mencionó la integración de industrias como la automotriz, señalando que México juega un papel crucial en la fabricación de vehículos vendidos en Estados Unidos. Según la mandataria, esta sinergia beneficia a ambos países y permite mantener los costos competitivos para los consumidores estadounidenses.