El británico Liam Delap quebró por fin la "maldición" de la camisa 9 e inscribió al Chelsea en octavos de final del Mundial de Clubes, al vencer 3-0 al Espérance de Túnez en la calurosa Filadelfia.
Para los más creyentes, la supuesta imprecación impide que quienes usen el clásico dorsal de los centrodelanteros brillen con el conjunto londinense, que enfrentará en la siguiente ronda al Benfica de Portugal el sábado en Charlotte.
Los lusos terminaron primeros del Grupo C, por encima del Bayern de Múnich, mientras que los ingleses fueron segundos del D con seis puntos, por detrás del Flamengo de Brasil (7).
Pero Delap, recién fichado del Ipswich Town, ya había dicho que no creía en supersticiones y este martes lo ratificó al anotar el segundo gol (45+3) de los ingleses, que de paso eliminaron al equipo más laureado de Túnez (3 unidades) del renovado torneo de la FIFA.
Enzo Fernández le filtró un pase dentro del área, donde el atacante de 22 años enganchó al defensor Yassine Meriah y definió suave con derecha para anotar su primer gol en tres partidos bajo las órdenes de Enzo Maresca.
El mediocampista argentino ya había firmado una asistencia dos minutos antes (45+3), al cobrar una falta que el espigado defensor inglés Tosin Adarabioyo conectó en el aire para vencer por primera vez a Bechir Ben Said.
El atacante juvenil Tyrique George (90+7), de 19 años, cerró la cuenta con un remate de fuera del área que halló una respuesta defectuosa del portero tunecino.
Primer gol
Tras la expulsión de Nicolas Jackson en la inesperada derrota contra el Fla (3-1) la jornada anterior, Delap tuvo el camino despejado para volver a ser el titular de los campeones de la pasada Conference League, un título menor para un equipo de gran presupuesto.
El atacante centro, por el que el equipo de Stamford Bridge pagó más de 45 millones de dólares, según la prensa británica, hizo gala de una efectividad profunda.
Marcó su primer gol con los azules -aunque el martes vistieron de blanco- en apenas dos remates directos al arco de Bechir Ben Said, inmóvil en las dos primeras anotaciones de los pupilos de Maresca, quien dejó en el banco a varios hombres importantes en un intento por cuidarlos del calor sofocante en el Lincoln Financial Field.
La casa de los Philadelphia Eagles del football americano presenció el despertar anotador del dueño de la camiseta 9 del Chelsea, con la que varias estrellas del fútbol - Falcao García, Álvaro Morata, Gonzalo Higuaín, Romelu Lukaku- no tuvieron suerte.
Le ayudó la falta de punch de los tunecinos, cuatro veces vencedores de la Liga de Campeones de África, pero que estuvieron lejos de ensuciar el uniforme del portero sueco Filip Jörgensen, quien reemplazó al español Robert Sánchez.
Sin dientes
Los Sangre y Oro, que en la fecha pasada eliminaron (1-0) al colista Los Angeles FC, fueron respaldados por sus ruidosos aficionados en "Philly", pero apenas mostraron reacción física o futbolística en un partido que podía llevarlos a la ronda de los 16 mejores.
De haber ganado, Espérance se habría matriculado en la siguiente ronda y de paso hubiera eliminado al conjunto de la capital de Inglaterra.
Salvo algunas contras mal manejadas en el primer tiempo, la ofensiva tunecina -que contó con sus goleadores brasileños Yan y Rodrigo Rodrigues- apenas demostró señales de vida.
Al confirmarse la salida de Espérance, solamente uno de los cuatro equipos africanos que aterrizaron en Estados Unidos mantiene opciones de clasificar a octavos, el Mamelodi Sundowns de Sudáfrica, que el miércoles enfrentará al Fluminense de Brasil en Miami, por el Grupo F.
Con información de AFP
Imagen: AFP