AFP
Escaso de fondo de armario la temporada pasada, el Arsenal ha exhibido músculo económico para reforzar su plantel y poder rivalizar con el poderoso Manchester City, su rival del domingo, que parece todavía un paso por delante de los 'Gunners'.
"Está claro que conmigo el Arsenal habría podido ser campeón". La declaración de William Saliba es un cruel recordatorio de la falta de profundidad de una plantilla que lastró las opciones de título de los londinenses, superados en la tabla por el City después de la lesión en marzo del defensor francés.
Los propietarios hicieron la misma constatación y pusieron toda la carne en el asador para ponerle remedio reforzando cada línea: el arquero español David Raya, el defensor Jurriën Timber, el centrocampista Declan Rice y el delantero Kai Havertz.
"Esta temporada, la profundidad del equipo es mucho mejor", afirmó Michael Brown, antiguo jugador del Manchester City en los años 90.
Según el portal especializado Transfermarkt, el valor de la plantilla del Arsenal subió un 82% en tres años para alcanzar los 1.090 millones de euros (1.155 millones de dólares), la segunda más cara de Europa después del Manchester City (1.180 millones de euros).
El trabajo realizado por Mikel Arteta, antiguo adjunto de Pep Guardiola en el City, es unánimemente aplaudido en Inglaterra, tanto por el juego del equipo como por el acertado recurso a las rotaciones de sus jugadores en el once.