Los jugadores del Hoffenheim y del Bayern Munich se negaron a jugar los últimos 13 minutos del partido que estaban disputando debido a ofensivas pancartas contra el dueño del equipo local, Dietmar Hopp.
Al minuto 77 los jugadores del Hoffenheim y del Bayern Munich rechazaron seguir jugando el partido y se dedicaron a pasarse el balón, justo cuando el marcador se encontraba 6-0 a favor de los visitantes.
Los seguidores más radicales o “ultras” del Bayern insultaron al dueño mayoritario y principal inversor del Hoffenheim debido a que no quieren que empresas tengan el manejo del fútbol alemán.
Para este sector de la afición, el manejo de los clubes alemanes tiene que ser administrado por socios y no por empresas.
Hopp, a través de sus empresas, quiere que el Hoffenheim luche por las primeras posiciones del torneo alemán y participe en competiciones como la Champions League o la Europa League.
Días atrás, el presidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB por sus siglas en alemán), condenó los actos ocurridos en el estadio del Borussia, donde también hubo pancartas contra Dietmar Hopp.
Información de Agencias
Imagen: @tsghoffenheim