Columnas
Acabamos de vivir unos días de tensión diplomática, no sólo de Estados Unidos hacia México, sino de ese país con Canadá, la Unión Europea y China, principalmente.
Cómo lo prometió, el presidente estadounidense Donald Trump firmó una orden ejecutiva que imponía aranceles de 25% sobre los productos importados de México y Canadá, para presionar a nuestro país a detener el flujo de migrantes y de fentanilo.
Sin embargo, con las gestiones que realizó la presidenta Claudia Sheinbaum, apoyadas en la Secretaría de Economíade Marcelo Ebrard y la embajada de México en EU, con Esteban Moctezuma, se logró un plazo de 30 días antes que Estados Unidos implemente dichos aranceles, lapso que, por cierto, ya está avanzando.
Este nuevo Donald Trump, que en su momento firmó el T-MEC, hoy busca presionar para renegociar este acuerdo, con base en lo que él considera un nuevo esquema económico y los daños que ha ocasionado la globalización.
Uno de los sectores más afectados, en caso de que se llegaran a imponer los aranceles, es el sector agroalimentario nacional y su motor exportador, en particular, productos como el tequila, mezcal, cerveza y hortalizas, que han tenido mucho éxito en aquel país.
Cabe recordar que en 2023, Estados Unidos importó tequila mexicano por un valor de 4 mil 600 millones de dólares y mezcal por 108 millones de dólares, según el Consejo de Espíritus Destilados de Estados Unidos, una organización comercial.
Asimismo, dicho país adquirió más de 45 mil millones de dólares en productos agrícolas de México, lo que incluye el 63% de los vegetales y el 47% de las frutas y frutos secos importados.
Si no lugar a dudas, Estados Unidos marcará un nuevo esquema comercial que llevará a otras economías menores o emergentes, a replantearse nuevas formas de comercio.
En nuestro caso, debemos replantear desde la academia, instituciones gubernamentales, de investigación y financieras, los nuevos esquemas a seguir, dado que la globalización, como la conocemos hasta ahora, sufrirá un cambio importante y marcará el futuro del sector agropecuario y agroindustrial.
En este replanteamiento debe estar dirigido no solo a una mayor producción, basada en equipamiento y tecnología, sino también en el consumo interno de nuestros productos.
Por cierto, ayer, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), informó que cruzó el primer lote de ganado bovino en pie a través de la estación cuarentenaria de San Jerónimo, Chihuahua, tras los acuerdos alcanzados entre el Gobierno de México y el de Estados Unidos, tras la pausa por la detección del gusano barrenador del ganado en suelo nacional.
Felicidades al Senasica, una institución clave para el desarrollo del sector primario nacional, para el crecimiento de la actividad económica y para cuidar la salud de la población.
LUIS P. CUANALO ARAUJO
Especialistas del sector agropecuario
Presidente del Colegio de Ingenieros Agroindustriales de México, A.C
Instagram: @luiscuanalo