Por GUADALUPE ROMERO
Cuando de reclamos por derechos y justicia se trata nadie puede negarse a escucharlos y mucho menos a darles atención. Innegable es que los llamados “gaseros”, los que distribuyen el energético en su presentación licuada (LP), de puerta en puerta en cilindros y con el llenado de tanques estacionarios en todo el país, algo tienen que decir pues las condiciones en las que trabajan, en particular relacionada con su seguridad y de los consumidores, son la real bomba de tiempo.
La orden está dada, el precio del litro de gas licuado o LP está topado; el jefe del Ejecutivo luego de anunciar la creación de la gasera estatal llamada Bienestar fijó que el máximo sea de 11.52 pesos para Ciudad de México, y en promedio para todo el país. El hecho fue la punta del iceberg de los repartidores para salir a protestar porque sus dirigentes señalan la ganancia por litro entregado será de apenas 5 centavos.
Hasta este punto dos problemas: la seguridad y los precios topados junto con la ganancia de los que abastecen de gas LP. Sobre el primer punto, grave es saber que casi 50% de los cilindros y tanques en los hogares y negocios de los mexicanos se encuentran en malas condiciones para contener tan volátil energético, según datos de las propias gaseras, donde se estima que existen más de 24 millones de cilindros en el territorio nacional.
Viene, viene… ¡otro paro!
Ayer, hoy y quizá mañana los repartidores de gas LP en CDMX se manifestarán por el anunciado precio máximo y, como dijeron ya sus dirigentes, a través de José Adrián Rodríguez, presidente de la Unión de Gaseros del Valle de México, volverán a parar las plantas distribuidoras para ser escuchados por los integrantes de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y las autoridades de la Secretaría de Economía (SE).
“Buscamos participar en el modelo económico de la venta del gas, es el último eslabón el que queda abierto y si este cae no vamos a poder tener garantía de llevar el suministro a sus hogares”, aclaran los quejosos y en quienes está la posibilidad de hacer llegar el energético.
El punto está en sus jefes, en los dueños de las plantas de gas LP, que aunque, según datos de la CRE, se contabilizan unas 1,700 el 60% pertenece solo a siete grupos o empresas distribuidoras, el resto es de un pulverizado sector conformado por otras 300 firmas.
La ganancia de los gaseros siempre ha rondado en los centavos, los mismos que en nada equivalen al grado de inseguridad en la que trabajan y el valor para enfrentar la situación recién fue encontrado, nada antes.
Los siete grupos dominantes del sector gasero tienen que ver (seguro que están preocupados por el bienestar y no por la nueva empresa Bienestar) con la determinación de los repartidores para ser atendidos. Ellos lo saben, ustedes lo saben… y si no al … ¡gaaasss!
Covid mueve los seguros
De acuerdo a la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), que preside Sofía Belmar, la pandemia Covid-19 detonó la contratación de los seguros de gastos médicos, los cuales registraron un incremento de 8.6 por ciento en el último año.
También pasó con la atención médica a distancia por medio de teleconsultas, ante las nuevas tecnologías, las que ya dictan el rumbo de varios sectores. Aquí nos encontramos con el caso de la firma Woow, fundada y dirigida por Margarita Zepeda Porraz, la cual vive su despunte en plena pandemia y cuenta con este servicio que le ayudó a disparar sus ventas.
La aseguradora 100% mexicana experimentó un incremento de hasta 57% en la contratación de estos servicios, debido a su portabilidad que figura como la nueva revolución del sector. Se trata del primer Marketplace en México donde el usuario tiene a su disposición más de 60 productos que van desde asegurar un dispositivo electrónico, el auto, un viaje y hasta nuestras mascotas. Algo muy atractivo para las nuevas generaciones, ya que tienen al alcance del celular la posibilidad de contratar casi cualquier tipo de seguro y recibir el seguimiento del mismo, en tiempo real.
Firmas como ANA Seguros, que dirige Raúl Barba, AIG, de Marcelo Hernández, GMX, de Jorge Flores, GNP, de José Eduardo Silva, HDI de Juan Ignacio González y Qualitas, recién tomada su dirección por José Antonio Correa, ya cuentan con un convenio para aparecer en esta plataforma y a la espera se encuentran otras.
El mercado crece y las opciones también.
Bien plantados y también en el aire
Luego de observar los efectos tan desiguales que ha tenido la pandemia en los distintos sectores productivos, no quedan dudas sobre la relevancia del cambio tecnológico y la innovación para generar valor y nuevas oportunidades.
Como ejemplo, que tal la firma inmobiliaria tecnológica o como se le conoce proptech, eXp México, que inició operaciones en el país hace medio año, ya registra 500 agentes inmobiliarios y de acuerdo con los resultados reportados por su matriz en el índice Nasdaq de Estados Unidos, en el último trimestre alcanzó un récord de ingresos con 1 billón de dólares, 183% más que en el mismo periodo del año anterior.
Estos números son el resultado de un modelo disruptivo, 100% digital, en un entorno colaborativo que incrementa el crecimiento y productividad de los agentes inmobiliarios
Aprovechemos para irnos de la tierra al cielo. Abordaré el tema más adelante pero no quiero dejar pasar, para que lo tengamos por ahí apuntados, que en medio de la situación por la que atraviesa el país y la industria aérea, en particular, loable es que Aeroméxico este imparable.
Hace unos días anunció que antes de terminar el año tendrá vuelos directos a Madrid desde Guadalajara, y ayer también lo hizo para adelantar que en diciembre próximo el puente aéreo será directo entre Monterrey y la capital española.
Trabajo, inversión y proyectos, visión de lo que viene y en donde hay que estar… bien por las huestes de Aeroméxico.