Columnas
El martes pasado, el 30 de enero será inolvidable para el Secretario de Seguridad Nacional de los Estados Unidos que esta en la antesala de un juicio político en su contra, por lo que determinaron de ignorar las políticas migratorias de la administración de Joe Biden y es que, la Comisión de Seguridad Nacional trabajo deliberó todo el día y parte de la nochehasta llegar a recomendar dos cargos de juicio político, una rara, muy rara acusación en contra de un miembro del gabinete que no se ha visto en casi 150 años.
Los republicanos en la Cámara de representantes y en general en el partido ondearon por todo lo alto la bandera de triunfo y bueno, Donald Trump, el más feliz.
Y es que en el fondo de todo este asunto está el tema de la elección presidencial de noviembre próximo. Todos los republicanos del Comité votaron a favor, mientras que los demócratas se mostraron unidos en contra…“no podemos permitir que este hombre permanezca más en el cargo”, dijo el presidente de la Comisión Mark Green, así o más claro.
A partir de este acuerdo todos en la cámara baja podría votar sobre el juicio que se le sigue a Mayorkas a partir de la semana que viene, de ser aprobados los dos cargos en su contra se remitirían entonces al Senado para un juicio, aunque los legisladores tendrán que conformar primero un comité especial para estudiar el caso, lo que en otras palabras significa, alargar la discusión del tema.
En una inusual solicitud personal Alejandro Mayorkas —inmerso en las negociaciones con el Senado sobre un paquete de seguridad fronteriza— escribió y publicó una carta a la Comisión de Seguridad Nacional en la que señaló que debería estar trabajando en conjunto con el gobierno del presidente Joe Biden para actualizar las “discontinuas y obsoletas” leyes migratorias para el siglo XXI y una era de migración global sin precedentes.
Y más allá de simpatías o no con Mayorkas y su trabajo, es cierto que debe afrentarse este importante tema migrante, más que, privilegiar la vía electoral, pero bueno, eso es en el espacio del deber ser, los republicanos lo ven diferente.
Y el todavía Secretario de Seguridad Nacional estadounidense, que por cierto no veo cómo pueda dejar de serlo, concluyó su carta pública con una contundente, pero sobre todo real afirmación…. “necesitamos una solución legislativa y sólo el Congreso puede proporcionarla”.
El tamaño del efecto migrante en los Estados Unidos, más allá de las acciones y discursos electorales partidarios, arroja una cifra alarmante de cruces, supera los 3.2 millones de personas detenidas, pero bueno los políticos están en la lucha por mantener u obtener el poder.
@arnc7