El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió "transparencia total" sobre los incidentes registrados en los alrededores del Stade de France durante la final de la Champions League, mientras aumenta la presión sobre su ministro del Interior, acusado de "mentir".
"Lo que el presidente quiere (...) es que se arroje luz sobre lo que realmente sucedió, con transparencia total y muy rápidamente", dijo la vocera del gobierno, Olivia Grégoire, tras una reunión del Consejo de Ministros.
La final del campeonato europeo que enfrentó el sábado Real Madrid y Liverpool (1-0) estuvo marcada por problemas de acceso al estadio situado a las afueras de París, robos a hinchas y la actuación policial para mantener el orden.
Bajo presión, máxime cuando París debe albergar en 2024 los Juegos Olímpicos, el titular de Interior, Gérald Darmanin, reconoció durante una comparecencia en el Senado que las "cosas podrían haberse organizado mejor".
Sin embargo, se reafirmó en las cifras avanzadas el lunes y en que el caos se debió a que entre unos "30,000 y 40,000" hinchas ingleses acudieron "sin entradas o con entradas falsas" a los alrededores del Stade de France.
En base a datos de los operadores de transporte y de la Federación Francesa de Fútbol (FFF), Darmanin habló de "110,000" personas dentro o en el exterior del estadio, cuya capacidad esa noche era de unos 75,000 espectadores.
"Varias entradas se duplicaron cientos de veces", agregó Darmanin, durante su comparecencia junto a la ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castéra. El lunes evocó un "fraude masivo, industrial y organizado".
Con información de AFP
Imagen: AFP