Cientos de manifestantes, en su mayoría miembros de la Judicatura Federal, se movilizaron este martes desde su plantón en Paseo de la Reforma hacia las calles aledañas a la sede alterna del Senado, en Xicoténcatl y Donceles, donde se discute la reforma judicial. En su intento por ingresar al recinto, se han registrado enfrentamientos con la policía capitalina, que mantiene un fuerte operativo de seguridad en la zona para evitar una nueva toma del espacio legislativo.
A pesar de las indicaciones de los líderes de la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (JUFED), quienes llamaron a mantener el respeto a las instituciones y evitar actos de violencia, algunos opositores a la reforma judicial desobedecieron y protagonizaron choques con las fuerzas del orden. Los enfrentamientos se han concentrado principalmente en la intersección de Xicoténcatl y avenida 5 de mayo, donde los cierres a la circulación también han afectado a los residentes del área.
Para contener los intentos de ingreso a la sede del Senado, la policía ha utilizado el contenido de extintores como medida disuasoria, lo que ha provocado que los manifestantes respondieran con gritos de "¡represión, represión!" y continuaran su protesta enérgica. El operativo policial ha sido reforzado, extendiéndose a las calles de Donceles, Tacuba y el cruce con Eje Central, donde también se han registrado conatos de enfrentamiento.
Además de los manifestantes opositores a la reforma judicial, a la zona han llegado grupos de jóvenes y adultos de organizaciones civiles que apoyan las modificaciones propuestas. Estas personas lanzaron consignas a favor de la reforma y en contra de la presidenta de la Suprema Corte, Norma Lucía Piña Hernández. Ante el riesgo de que se produjera un enfrentamiento entre ambos grupos, la policía capitalina tuvo que intervenir y establecer un cerco adicional para evitar confrontaciones.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) informó que el operativo de seguridad se implementó a petición del Senado, con el objetivo de resguardar la integridad de los senadores, trabajadores, medios de comunicación y demás personas presentes en la sesión. La SSC aseguró que el personal operativo no utiliza gas ni otros elementos de represión, solo equipamiento de protección personal como cascos, rodilleras, escudos y extintores para prevenir incidentes de mayor gravedad.
El cerco policial también se ha extendido hasta avenida Juárez y su cruce con Reforma, en un esfuerzo por evitar que más manifestantes lleguen a las inmediaciones de la sede del Senado en Xicoténcatl. Las autoridades mantienen bajo vigilancia la situación en la zona para garantizar el desarrollo pacífico de la sesión y evitar nuevos enfrentamientos.