Con motivo de la celebración del Día del Biólogo, que se celebra este jueves 25 de enero, la Secretaría del Medio Ambiente (SEDEMA), reconoció la labor de biólogas y biólogos, quienes con su labor ardua y continua contribuyen en la transformación ambiental de la Ciudad de México y la conservación de la biodiversidad.
La dependencia señaló que con la puesta en marcha de acciones y estrategias, en las que intervienen diferentes profesionales día con día, han permitido la mejora de las condiciones ambientales, lo que se asocia al aumento de la biodiversidad. Un ejemplo es el incremento de las aves registradas en la Ciudad de México, pasando de 355 a 397, es decir, 42 nuevas especies de aves que enriquecen la vida silvestre de la capital.
“La suma de acciones y estrategias encaminadas al conocimiento, protección y conservación de la naturaleza han permitido, además, contar con más registros de especies que antes no se observaban fácilmente en la ciudad, como el coyote, el lince americano, zorra gris, venado cola blanca, coatí de nariz blanca (Nasua narica), así como un aumento del registro de aves como gavilán de Cooper, mirlo garganta blanca, carpintero de pechera común, colibrí garganta azul y diversas especies de aguilillas”, destacó.
Destacó que la implementación del Programa de Monitoreo de la Biodiversidad de la Ciudad de México en Áreas Naturales Protegidas y Áreas de Valor Ambiental, en el que intervienen biólogas y biólogos, ha servido para conocer la diversidad de hongos, flora y fauna, así como tomar decisiones y diseñar estrategias en materia de conservación, preservación y cuidado, además de actualizaciones en los programas de manejo de las áreas protegidas.
“Este programa permitió detectar hallazgos importantes a través de cámaras trampa y otros métodos de monitoreo. Cada uno de los avistamientos son indicadores de las condiciones de equilibrio que se viven en la actualidad en materia ambiental con la rehabilitación de Áreas Naturales Protegidas y Áreas de Valor Ambiental, el incremento de áreas verdes, la creación de jardines para polinizadores, la construcción de nuevos parques que, en conjunto, han permitido mejorar y aumentar el hábitat disponible para la flora y fauna silvestres”.
Finalmente, la Secretaría del Medio Ambiente reconoció el trabajo que las biólogas y biólogos del país realizan para conocer, valorar, proteger y conservar la riqueza biológica que sustenta la vida en el planeta.
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