A pesar de que el 20 de enero del 2020, fue la fecha marcada por la Constitución Estadounidense para el cambio en la presidencia, Donald Trump parece no haberse ido del todo y políticos de alto nivel como el gobernador de Texas, Greg Abbott, mantiene sus ideas vivas, ahí está el anuncio de que continuará con la construcción del muro que tanto presumió el anterior inquilino de la Casa Blanca.
En verdad que los políticos buscan estar en las conversaciones del momento y Abbott honra ello, parece no darse cuenta o no importártele que Trump fracasó en esta idea, lo dicho la semana pasada en la reunión fronteriza de seguridad es una estrategia publicitaria, sabe que es imposible de realizarlo, no tiene el dinero ni el apoyo de político para conseguirlo pero sobre todo legalmente no puede: invadir, incautar o expropiar la tierra donde según él, lo construiría, olvida o quiere minimizar que son propiedad privada esos terrenos.
Platiqué telefónicamente con la profesora, Natalie Nanasi, profesora de derecho de Southern Methodist University…” cuando Abbott está pensando en construir un muro debe tener en cuenta a todos esos diferentes propietarios. Habrá diferentes reglas, requisitos y regulaciones que impactarán la capacidad del estado de Texas para tomar esa tierra y también para usarla para los propósitos que sugiere”.
México y Texas comparten frontera en 1,200 millas, cerca de 200 mil kilómetros de territorio de propiedad privada, estatal y federal.
El gobernador Abbott sabe que la Agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) opera bajo el mandato del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y ambas responden a una política federal y no estatal. Texas un es un estado independiente, pero ahí se topa con pared.
Sin duda que uno de los grandes problemas que enfrenta Estados Unidos es el migratorio y el presidente, Joe Biden ha lanzado varias órdenes ejecutivas que se discuten en estos días en el Congreso en busca de una solución. Desde 2016 el tema de la construcción de un muro en la frontera sur para evitar el paso de migrantes sin documentos que ha estado en la agenda nacional, pero con la llegada de una nueva administración, se anunció el fin la construcción de muro, sin embargo, el gobernador insiste en ello, ha manifestado su intención de hacerlo.
Hay muchas respuestas que tendrá que dar el gobernador antes de comenzar con su proyecto, por ejemplo; ¿quién va a revisar el estatus migratorio de los detenidos ya que la autoridad estatal no tiene autorización?, ¿qué pasará con las ciudades seguras o santuarios que tienen programas de cooperación con ICE? ¿de dónde obtendrá los fondos para la edificación? ¿legalmente en dónde basará su defensa y quién la dirigirá?
@ncar7