"No tenía ninguna amenaza, no tengo pleitos personales con nadie, no tengo deudas, pero alguien me quiso matar anoche", dijo el periodista mexicano Ciro Gómez Leyva luego de que fuera víctima de una agresión con un arma de fuego. El Gobierno de la Ciudad de México ya investiga el móvil de este atentado directo y en el siguiente video te contamos los detalles.
Con Información que ha dado el propio periodista, datos proporcionados por la policía y entrevistas con vecinos permiten reconstruir el ataque contra el comunicador, que resultó ileso gracias al blindaje de su carro.
Elementos de la policía resguardan el domicilio del periodista mexicano Ciro Gómez Leyva, un día después del atentado que sufrió en la colonia Florida de Ciudad de México, el 16 de diciembre de 2022.
Leopoldo Santos estaba por dormirse cuando escuchó los disparos. Ruidos fuertes, dice, “un sonido grueso, calibre 38 o 45 por lo menos. Al menos fueron ocho o nueve”. Vecino de la calle Tecoyotitla, en el sur de Ciudad de México, le extrañó tanto escándalo. En los 12 años que lleva viviendo en el edificio, no había escuchado nada parecido. Sabía de los “cristalazos”, habituales en la calle: criminales llegan los fines de semana, abren los vehículos que hay aparcados junto a la banqueta y se llevan lo que hay dentro.
Los balazos que escuchó Santos iban dirigidos contra el popular periodista Ciro Gómez Leyva, uno de los más influyentes del país. A eso de las 23.00, al terminar el noticiero de televisión que conduce en la noche, Gómez Leyva tomó el camino hacia su casa. Avenida Universidad.
Poco antes de las 23.10, según ha contado el periodista en redes y en su programa matutino de radio, tomó la calle Tecoyotitla y, antes de llegar al cruce con Olivos, al pasar una taquería, un coche le cerró el paso. Luego, empezaron a dispararle desde una moto. “Todo indica que alguien me quiso matar”, ha dicho el locutor.
El ataque es uno más de tantos que ha sufrido la prensa en México estos años, una de las vergüenzas nacionales. Los asesinatos de periodistas ascienden a más de una decena cada año desde hace ya varios.
El atentado ocurrió muy cerca de la casa del periodista, a no más de 500 metros. Gómez Leyva vive en un condominio al final de Tecoyotitla, una zona de clase media alta, muy cerca del barrio histórico de Coyoacán y el hermoso parque de los Viveros, donde los vecinos dicen que suele ir a correr.
El reportero ha explicado que al sentir que le disparaban se agachó. El carro que había delante de él, compinchado con los atacantes, no le dejaba pasar. Los tiros llegaron primero del lado izquierdo, por la ventana del conductor. Gómez Leyva dice que alcanzó a ver a dos hombres en la moto, uno disparando.
El locutor ha explicado que los sicarios siguieron tirando mientras escapaban, Tecoyotitla abajo, rumbo al camellón de Vito Alessio Robles, que comunica dos de las vías más transitadas de la ciudad, Universidad e Insurgentes. Gómez Leyva notó que su vehículo, que recibió al menos cuatro disparos, no funcionaba bien. Ha dicho que recordó que justo en Olivos vivía un amigo, Manlio Fabio Beltrones, dirigente histórico del PRI. El reportero llegó a la garita de seguridad de la casa, se presentó y pidió ayuda. Beltrones lo acogió.
Según vecinos de la zona entrevistados este viernes, las primeras patrullas no tardaron ni dos minutos en llegar al lugar de los hechos. El ataque fue justo bajo la ventana de Santos, que vive en un séptimo y cuenta 76 años. Abogado retirado, el hombre llamó enseguida al número de emergencias y contó lo que había escuchado. “Sí estuvo alarmante”, explica, “no fue una cosa así… No, no, fueron eso, ocho o nueve disparos gruesos. Mi esposa no pudo dormir en toda la noche”.