Con el objetivo de reclamar mejores condiciones laborales, falta de medios, y aumento de salarios, bomberos marcharon en las calles de París cuando se desató un enfrentamiento con la policía por salir del recorrido autorizado.
Durante la marcha, algunos bomberos se prendieron fuego como símbolo de su inconformidad que posteriormente sus compañeros les apagaron con extintores.
Las fuerzas de seguridad lanzaron gases lacrimógenos y utilizaron porras en contra de los manifestantes.