Columnas
En Ecatepec se padece una crisis hídrica por el desabasto de agua en más de 200 colonias, pero además se enfrenta una emergencia en materia de infraestructura hidráulica, debido al abandono de equipos de pozos y cárcamos a los cuales no se les dio mantenimiento preventivo en los últimos años.
El 90 por ciento de los cárcamos de la denominada Quinta Zona están fuera de operación porque no funcionan las bombas, lo cual impide el desalojo de aguas pluviales y drenaje, y ello ocasiona inundaciones ante fuertes precipitaciones como ocurrió durante la semana en colonias como Ciudad Azteca, Rinconada de Aragón y en Plaza Aragón.
Mientras ciudadanos reclaman la falta de agua, otros padecen por inundaciones en calles y viviendas, por falta de atención a los sistemas de drenaje, ya que no ha habido rehabilitación a los equipos, e incluso se ha actuado con negligencia para atender la infraestructura hidráulica municipal.
Es tal el abandono de pozos y cárcamos que de los cuatro equipos que se requieren para el sistema de bombeo, en la mayoría de los casos solo funciona uno, porque no se dio el mantenimiento que requieren, y ello reduce al mínimo la capacidad de desalojo de aguas pluviales y de drenaje, lo que ha generado las recientes inundaciones.
Estaremos al frente de un gobierno que actué con honestidad y eficacia, pero buscaremos el respaldo del Gobierno federal y estatal para atender el grave abandono en el que se deja al municipio, para realizar un trabajo correctivo, preventivo y que se enfoque en la rehabilitación de los equipos.
Una vez que entre en funciones el nuevo gobierno en enero, iniciarán labores para prevenir inundaciones, será con mucha anticipación a la época de lluvias, con desazolve de redes, limpieza de barrancas y mejoramiento de la infraestructura.
El mayor techo presupuestal que ejercerá el gobierno de Ecatepec, a partir del 2025 será para atender el desabasto de agua, pero también la infraestructura hidráulica, con un proyecto integral con visión de sustentabilidad ambiental, que incluirá reforestaciones en comunidades para colocar arbolado urbano que permitan la filtración de agua al subsuelo.
También serán prioridad los trabajos de conservación en la Sierra de Guadalupe, para frenar el crecimiento urbano, y la construcción de presas de gavión en busca de retener hasta un 60 por ciento de las aguas pluviales y evitar que inunden las partes bajas.
Ante el deterioro de la infraestructura, vamos a requerir de la participación de todos los sectores, por ello haremos un llamado para que se sume la iniciativa privada, los vecinos y los tres niveles de gobierno, para poner en marcha las medidas que nos permitan encontrar alivio ante las inundaciones que cada año afectan a vecinos, comerciantes y empresarios.