Khalid Abulief, Asesor del Ministro de Energía del Reino de Arabia Saudita, Su Alteza Real el Príncipe Abdulaziz Bin Salman Al Saud
Durante más de un siglo, el carbono ha sido componente principal de los sistemas de energía que ha hecho prosperar la economía del mundo, sin embargo, mientras el mundo busca soluciones para abordar el problema de las emisiones, tomando en cuenta la pandemia de COVID-19, su impacto económico y social, debemos equilibrar la necesidad de sustentabilidad con el crecimiento económico. La Economía Circular de Carbono (CCE, por siglas en inglés), puede hacerlo. La Economía Circular de Carbono, engloba las 4 R’s: Reducir, Reusar, Reciclar y Recuperar.
La tierra lleva millones de años creando este equilibrio, un flujo natural y estable de carbono entre la atmosfera, el océano y los ecosistemas terrestres. Recientemente, los humanos han jugado un papel simple en este ciclo, ya que han extraído el carbono de la tierra y la biosfera durante cientos de años y lo han usado como combustible para crear energía, propagándolo a la atmosfera, sin embargo se puede imitar el proceso natural de la tierra cerrando el ciclo, en consecuencia, no solo reduciremos las emisiones, sino que las reusaremos, reciclaremos y recuperaremos por completo a través de la eficiencia energética, del uso de energías renovables de la tecnología y de soluciones basadas en la naturaleza.
Al pensar en Arabia Saudita, mucha gente nos ubica en el petróleo, debido a que hemos sido líderes en este tipo de energía durante décadas. Sin embargo, en un mundo de cambios con requisitos de sustentabilidad energética, es necesario reducir las emisiones. Queremos sacarle partido a nuestro patrimonio y a nuestras capacidades para continuar siendo líderes en la energía en la próxima generación de tecnologías sustentables, especialmente las relacionadas con lo que plantea la CCE.
Somos uno de los principales inversores globales en tecnologías de energía limpia y ya usamos la captura de carbones para extraer CO2 del proceso industrial, usándolo para mantener la presión de los depósitos de petróleo, mejorando así su recuperación y reusándolo como materia prima para otros procesos industriales.
Como líder mundial en producción de energía y siendo de los primeros en usar la tecnología de captura de carbono, es nuestra responsabilidad buscar una solución para equilibrar la necesidad en la reducción de las emisiones mundiales y mejorar la sustentabilidad sin afectar el crecimiento económico.
Salvaguardar el planeta es un pilar importante de nuestra Presidencia en el G20 y la CCE es clave para lograr este objetivo.
Y asegurar así un mundo mejor para las futuras generaciones. Aún falta mucho por hacer para ampliar la CCE.
Es necesario un avance rápido en la investigación, desarrollo, utilización y propagación (RDD&D, por sus siglas en ingles) y comercializar tecnologías, innovaciones y practicas prometedoras, para lograrlo, el G20 ha lanzado el acelerador de la CCE, donde los miembros del G20 y no miembros puedan identificar, aprovechar, ampliar y facilitar la colaboración con la CCE, y así avanzar mundialmente hacia una energía asequible, fiable y más sustentable para todos.
El acelerador apoyará la colaboración en materia de tecnológica y ayudará a la introducción en el mercado con un mayor nivel de preparación, reduciendo así los costos y logrando economías de escala.
El acelerador también buscará promover modelos empresariales innovadores, opciones normativas, regulatorias, así como mecanismos de financiación para ayudar a crear asociaciones público-privado más fuertes.
La Presidencia del G20 de Arabia Saudita, considera que el carbono no debe ser un enemigo, sino un aliado para lograr la sustentabilidad, reduciendo las emisiones y equilibrando al mismo tiempo un crecimiento económico integrador en un mundo posterior al COVID-19. Y, sin duda, hemos dado un paso importante durante la precedencia de estos años para hacer realidad esta visión.