Columnas
En pleno proceso presidencial, Ricardo Monreal ha demostrado la capacidad política que tiene para aportar a la causa de Claudia Sheinbaum. De hecho, su contribución se ha visto reflejada de distintas formas. Por un lado, recordemos, fue nombrado por la candidata de Morena, como coordinador de enlace territorial, una tarea determinante en la planeación de la logística. Inclusive, muchas decisiones pasan por su gestión, especialmente en el diseño de estrategias que, a la postre, jugarán un rol decisivo. A su vez, el zacatecano tiene otras funciones que van más allá del armado terrestre. Hablamos de lo que significa una voz elocuente y sensata para lanzar una opinión reflexiva que sirva para defender el proyecto presidencial que encabeza Sheinbaum.
Hace poco, en efecto, Ricardo Monreal defendió al movimiento desde el pleno del Senado de la República ante los ataques sistemáticos de la oposición, máxime tratándose de una embestida de maquinación. Y Monreal, por lo que representa en madurez y experiencia, está influyendo para que la perspectiva social siga generando las condiciones de triunfo. De hecho, no tengo ninguna duda, como han mostrado las encuestas, que Claudia ganará la elección presidencial con un margen de votos importantes que, al final de cuentas, terminen por legitimar el proceso democrático que viviremos el próximo dos de junio.
Además de ello, hemos sido testigos, Ricardo Monreal es un interlocutor muy eficiente para encauzar la unidad. Vale la pena destacar los encuentros que ha tenido en varios puntos del país con candidatos y liderazgos que disputarán posiciones claves en este ejercicio. Incluso, ese grado de madurez se convierte en un mecanismo o instrumento que, para un proceso electoral, también provoca un impacto positivo. Basta observar las opiniones y los artículos que comparte en la opinión pública. En todo caso, su contenido es de gran interés social en un universo político-electoral.
De ahí que el efecto de Ricardo Monreal esté rindiendo frutos. Como sabemos, Catalina Monreal y Saúl Monreal, jugarán posiciones claves en la elección del próximo dos de junio. En ese orden, Caty esla favorita para ganar la alcaldía Cuauhtémoc. De acuerdo con la encuesta de encuestas, la abanderada del lopezobradorismo promedia una intención del voto muy superior al 52%. Con ese margen amplio de diferencia, Caty arrancará campaña en unas semanas más. De hecho, hemos sido testigos del capital político que ha construido en estos meses previos. A eso, desde luego, se suma la capacidad territorial que le imprimirá Ricardo Monreal para influir a favor de Morena.
Y como las probabilidades son mayúsculas, Catalina Monreal le devolverá al lopezobradorismo, en términos políticos e históricos, uno de los bastiones más importantes de la izquierda en la Ciudad de México. En todo caso, la coalición “Seguimos Haciendo Historia” es la gran favorita para ganar. La encuesta de encuestas, por ejemplo, reconoce el paso imponente de Caty, como resultado de su gran activismo social que, a lo largo de mucho tiempo, ha llevado a cabo. Eso le ha favorecido para consagrarse como un liderazgo. Dicho en otras palabras, su perfil encajó perfectamente en un momento coyuntural clave para recuperar la alcaldía.
Otro aspecto relevante, sin lugar a dudas, es el paso sólido que lleva Saúl Monreal, candidato de Morena al Senado de la República. Él, a propósito, ha confirmado el instante que vive. De hecho, su ventaja en las encuestas lo ponen en condiciones inmejorables para ganar la votación. Debido al buen momento que vive la entidad de Zacatecas, Morena se sigue afianzando como la primera fuerza política en aquella entidad federativa. Eso se pudo observar en la evaluación mensual para medir el desempeño de los mandatarios a nivel nacional. Con esa premisa, el lopezobradorismo se llevará la fórmula para la Cámara Alta, lo mismo que la mayoría de distritos federales y, por supuesto, los ayuntamientos de mayor trascendencia, como la propia capital. A eso, evidentemente, lo podemos llamar como el efecto Monreal.