En camino de la nueva normalidad


Es claro que hay diferendos, angustia y confusión por la falta de apoyos oficiales para enfrentar la crisis económica que se avecina o por la disonancia generada en materia de política energética; pero lo cierto es que no ha dejado de haber colaboración entre la iniciativa privada y el gobierno.

Y para muestra está el donativo de 2 mil ventiladores que diversas compañías como Grupo Bimbo, Grupo México y Grupo Televisa acaban de entregar al Gobierno federal, en un acto de responsabilidad social, para atender a los pacientes en estado crítico que requieren terapia intensiva, y que fundamentalmente se ubican por ahora en la CDMX, Baja California y Estado de México.

Esto, por cierto, motivó el reconocimiento del Centro Mexicano para la Filantropía (Cemefi) y la Alianza por la Responsabilidad Social Empresarial por México (AliaRSE), a diversas empresas entre ellas Grupo Televisa, por cumplir con los estándares para alcanzar el Distintivo ESR 2020.

Es una buena señal que, pese a las inevitables diferencias entre la clase empresarial y el Gobierno federal, ambos tengan claro que por ahora la prioridad es salvar vidas y si en eso éstos pueden hacer sinergia, la sociedad lo va a agradecer y mucho.

IMSS, regreso ordenado

Y ahora que se empieza a materializar la llamada “nueva realidad” en México, tras el inicio de la normalización de la vida cotidiana en los municipios libres de Covid-19 y del inicio de actividades, como la construcción, automotriz y minería, el IMSS, de Zoé Robledo, se ha convertido en pieza clave en la negociación y trazo de ruta para la reapertura; siendo fundamental el Plan de Reactivación Económica con sus tres ejes: vigilancia epidemiológica, minimizar cadenas de contagio y fortalecer cobertura médica. Así, el cuidado de la salud de los trabajadores va en serio, y en el instituto están muy conscientes de lo grave que sería un rebote epidémico.

Cuidar el empleo

Y ya que hablamos de cuidar a los trabajadores, la organización TallentiaMX, que dirige Elías Micha, insiste en aprovechar la subcontratación responsable y profesional como una estrategia que permita combatir abiertamente el desempleo, generar puestos de trabajo digno y caminar hacia la recuperación económica. Es bien sabido que alrededor del 30% del trabajo formal en México es por subcontratación; es decir, 8.5 millones de puestos de trabajo, y de ellos, 59% son hombres y 41% mujeres. Entre 2004 y 2019, la subcontratación creció del 17 al 42 por ciento.