David Malpass, presidente del Banco Mundial (BM), expuso que hay urgencia por mejorar la calidad del sistema educativo internacional, que se vio afectado por la pandemia por Covid-19, en un mundo que atraviesa el gran reto del cambio climático, aunado a desafíos en materia de competitividad, alza de tasas y deudas que llegan a ser insostenibles.
Se tiene previsto por el Banco Mundial que la economía mundial crecerá un 1.7% en 2023, desaceleradamente por la elevada inflación, el aumento de las tasas de interés, la reducción de las inversiones y el conflicto de la invasión de Rusia a Ucrania.
De este modo, “es urgente mejorar los sistemas educativos en los países alrededor del mundo”, que cerraron sus planteles educativos al inicio de la emergencia sanitaria por Covid-19, comentó Malpass. Además dijo que el resultado fue un retraso en el nivel educativo, el cual compromete el desarrollo.
También, el economista estadounidense agregó que “las barreras al comercio continúan siendo un problema. Los países buscan la autosuficiencia cuando realmente lo que necesitan es buscar competitividad, eso quiere decir, comerciar a través de las fronteras”, explicó Malpass.
“Las economías más avanzadas están absorbiendo enormes cantidades de los capitales del mundo para un grupo estrecho de compañías e individuos”, dificultando el panorama para los países en vías de desarrollo, apuntó.
Es así, que a juicio de Malpass, es necesario implementar reformas macroeconómicas que “logren elevar los estándares de vida y ayudar a generar los ingresos necesarios” para acercar a la población a una variedad de servicios disponibles.