Se había mantenido en las sombras, discreto, alejado de la opinión pública, se sabía fuerte, y se sentía intocable. Su nombre es Germán Larrea, el segundo hombre más rico de México, conservador y callado, pero fuerte opositor a la Cuarta Transformación. Ya no es invisible, ya no es intocable, el poder político ya no está a su servicio. Ya no es el jefe de jefes.
Como lo he venido afirmando desde inicios de este sexenio, el gran legado del presidente Andrés Manuel López Obrador será la separación del poder político del poder económico, y la historia se encargará de recordárnoslo.
Germán Larrea, era hasta el 2018, el verdadero “jefe de jefes”, y como en el corrido del autor Teodoro Bello, oriundo de un bonito y apacible municipio mexiquense, San Simón de Guerrero, y que hicieran famoso Los Tigres del Norte, lo respetan a todos niveles y su nombre y su fotografía nunca van a mirar en papeles, porque el periodista lo quiere y si no, su amistad se la pierde.
Justo así, el corrido mexicano no podía ser más ilustrativo; pero, las cosas han cambiado y personajes como Larrea, también deben cambiar y adaptarse. Acostumbrarse a que no se puede obtener ganancias a costa de lo que sea, de la naturaleza y de la gente. Se deben terminar los escándalos de corrupción y protección desde el poder.
Nunca más otra tragedia como en la mina Pasta de Conchos en 2006 o en la mina de Charcas, en San Luis Potosí. Nunca más otro desastre ambiental como el derrame de millones de litros en los ríos Bacanuchi y Sonora, afectando a miles de personas, cultivos y animales. La historia de derrames químicos de Grupo México es larga.
No debe volver a repetirse la represión que sufrieron en 2010, los trabajadores mineros en huelga en la mina de Buenavista del Cobre, Cananea, cuando el entonces presidente Felipe Calderón mandó a la Policía Federal, complaciendo a Larrea.
Si bien la historia de la fortuna de la familia Larrea viene desde mediados del siglo pasado, fue con la llegada de Carlos Salinas de Gortari al poder y con su política neoliberal privatizadora, que Germán Larrea dio el salto a las grandes ligas de los hombres más ricos del mundo. Y es porque su fortuna gira en torno a concesiones de bienes y servicios, que los últimos 5 presidentes neoliberales le fueron entregando, para desgracia de los mexicanos.
Lo mejor que puede suceder en este gobierno, es poner a la vista a Germán Larrea, que todo México sepa el tipo de negocios y beneficios que se pueden obtener al amparo del poder público. Se deben revisar todas las concesiones que tiene, frenar el saqueo y la explotación laboral, los ecocidios y la impunidad.
Porque como bien dice el corrido citado, desde arriba nomás se divierte, pues le gusta que así se confundan.
ENTRE GITANOS.
¿PRESIDENTE A LOS 70?
Ante la falta de corcholatas, la oligarquía ha tenido que desempolvar a Santiago Creel, quien ya se había resignado a ejercer el papel de líder moral de las nuevas generaciones opositoras. En sus mejores tiempos, no pudo vencer a Andrés Manuel López Obrador en la CDMX y no pudo vencer a Felipe Calderón en la carrera por la candidatura presidencial del PAN, a pesar de contar con todo el apoyo del entonces presidente Fox.
Quienes critican y atacan al presidente López Obrador por su edad, se encuentran en el predicamento de que la única corcholata que puede darles un porcentaje decente de votos, tendría 70 años en el inicio del próximo gobierno, justo la edad en la que López Obrador concluirá su mandato. Entre liberales esto no importaría, los conservadores no pueden decir lo mismo.
MARATÓNICA SESIÓN
Todo indica que a las y los diputados del Congreso de la CDMX, se les viene un pesado cierre del segundo período ordinario de sesiones. Tienen hasta mañana para sacar todos los asuntos urgentes y que no pueden quedarse y exponerse a la posibilidad de aprobar un período extraordinario. Es un riesgo innecesario, mejor una sesión maratónica, que los libere para irse a la elección del Edomex; unos para operar el fraude y otros para defender el triunfo de la maestra Delfina.
*Especialista en Ciencia Política y Gobierno.
avilezraul@hotmail.com