LA CORTE Y LA BALANZA

Con el cambio de la presidencia del máximo Tribunal Constitucional del país, la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha tomado un nuevo rumbo y virado a convertirse en un peso real dentro de los pesos y contrapesos que conforman a los Poderes de la Unión, es decir, la Corte empieza a tomar decisiones que ponen un freno a las acciones canibalescas que buscan obtener el poder por el poder.

Por lo que hace a las acciones realizadas por la Corte esta semana, el ministro instructor del análisis de la constitucionalidad de Plan B, ordenó suspender los efectos de la reforma en los estados donde actualmente hay procesos electorales, es decir, tanto en el Estado de México, como en Coahuila, es decir, con dicha acción se busca respetar que ninguna reforma en materia electoral podrá ser incorporada si no fue aprobada al menos noventa días antes del inicio del proceso electoral.

Así, la Corte busca dar claridad y mantener la certeza del proceso que se está desarrollando y no generar una ventaja para alguno de las o los candidatos que están participando en dentro de dicho proceso electoral y la razón de ser se puede analizar.

Por un lado, si la corte permitiera que los efectos de la reforma se incorporaran en los procesos electorales que están en curso directamente iría en contra de sus criterios previamente establecidos, toda vez, que, en casos anteriores, cualquier reforma hecha posterior a los noventa días queda sin aplicación inmediata al proceso electoral que se esté realizando. Y es aquí donde cabe una pregunta, ¿Si, la Corte fuera dirigida por algún ministro a fin de la cuarta transformación se hubiera ordenado la suspensión en los estados que están en proceso electoral?.

Así, el proceso electoral en el Estado de México y Coahuila tendrá que llevarse a cabo con las reglas establecidas con anterioridad, es decir, no se podrá hacer promoción de programas sociales y de acciones de gobierno al momento que se declare la veda electoral. No obstante, pareciera que eso beneficiaria a los candidatos de MORENA y no a los de la oposición, dado que para estos últimos sería una limitante.