En el registro civil de España se permitirá cambiar el nombre y el sexo de las personas sin necesidad de un informe o tratamiento médico. Será válido desde los 16 años, y entre los 12 y los 16 deberá ser con consentimiento de los padres o tutores, lo anterior es lo que considera el borrador de la ley de igualdad de las personas trans propuesto por el Ministerio español de Igualdad.
Las personas transexuales esperan que con esto, puedan reivindicar su identidad, algo tan básico e íntimo, sin que un tercero determine quiénes son.
Las leyes españolas exigen un diagnóstico médico y un tratamiento hormonal de dos años para que una persona transexual pueda cambiar de sexo en el registro civil.
Esta propuesta considera la protección y derechos específicos a toda aquella persona “cuya identidad de género no se corresponde con el sexo asignado al nacer”.
Además, considera los ámbitos educativo, laboral y deportivo y la no especificación del sexo en los documentos oficiales de identidad.
Aunado a los tratamientos hormonales y quirúrgicos, se propone que “las personas trans con capacidad de gestar” accedan a las técnicas de reproducción humana asistida.
Esta ley fue un tema de debate entre el feminismo español, pues el Partido Socialista (PSOE) dijo que la autodeterminación del género pone en riesgo “los derechos, las políticas públicas de igualdad entre mujeres y hombres y los logros del movimiento feminista”.
Imagen: Cuartoscuro