Columnas
Me preguntan ¿por qué hay crisis en la vivienda? Respondo: porque aún no se palpan ni las reglas de operación, ni el arranque del programa gubernamental de “Vivienda para el Bienestar” y porque no se han dado las facilidades para que constructores y desarrolladores “emprendan” nuevos proyectos en el país.
Mucho menos se ven alicientes en ciudades tan complicadas como la de México y otras similares. Entonces salvo el “boom” que vive Mérida y zonas aledañas, todavía la derrama no cae en cascada en todo el país.
Además le sumamos que el encarecimiento en la vivienda que se ha venido dando postpandemia por el alza en los insumos básicos como el cemento, el concreto, y todos los derivados del acero como aluminio, alambrón, varilla, etcétera.
Entonces los precios promedio de incremento que reportó Sociedad Hipotecaria Federal en 8.6% el año pasado se desfasan de los incrementos salariales y para una persona promedio con salario promedio, esto es bajo, no le da para ser sujeto de crédito y comprar una vivienda que haya en existencia.
Podría solicitar vivienda económica, pero esa todavía no se detona. La “vivienda del bienestar” que se prevé de 60 metros cuadrados y precio de 600 mil pesos es muy cotizada; tiene la mayoría de la demanda actual, pero no todavía no hay oferta.
De hecho todavía no termina de arrancar la construcción de la Vivienda para el Bienestar, el programa con el que el gobierno federal se propone detonar con la Sedatu como líder y a través de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) y del Infonavit más de un millón de viviendas en este sexenio, de tipo social.
El Infonavit va aprendiendo en el camino de la mano de los desarrolladores, principalmente los afiliados a Canadevi que lidera Carlos Ramírez Capó; aunque ya se anunció el arranque del programa y construcción de primeras viviendas hace poco más de un mes “el banderazo” por parte de la Presidenta Sheimbaum desde Cancún.
Lo que queda claro es que el nombre de “Infonavit constructor” quedó como nombre, pues se requiere de los constructores principalmente afiliados a la CMIC en el país y de los desarrolladores, así como de los proveedores para hacer realidad la edificación de “La vivienda para el Bienestar”.
Y, por otra parte, los empresarios piden apoyo al igual que en desregulación tramitológica para todos los proyectos de vivienda, no sólo para el programa del gobierno; esto incentivará la construcción ¡que buena falta hace!
Por cierto
Hablando de vivienda residencial esta semana Marcos Salame J, presidente del Grupo Bosque Real anunció una alianza estratégica con un diseñador urbano de clase mundial (Elie Saab Maison), a través de la cual construirán cuatro torres de ultra lujo.
Y con esto apenas van en el 30% del desarrollo del gran proyecto de Ciudad autosustentable y autosostenible que conserva, según dijo el empresario, 3 millones de metros cuadrados de área verde “intocable”.
Queda claro que la vivienda más requerida es la social y para ello se requiere que la detone el gobierno federal de la mano de los empresarios, pero en gustos y presupuestos también hay demanda para la vivienda ¡por supuesto media! Y también para la residencial y ¡residencial plus!
AGENDA
Ya viene la Proptech Latam Summit Week en junio desde #Cdmx para conocer innovaciones y propuestas para el mundo inmobiliario
PREGUNTA
¿Cómo prevés se resuelva la crisis de la vivienda en México?
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