Tras la salida de clubes ingleses, la Superliga queda suspendida

Una vez confirmada la salida de la Superliga por parte del Big Six de la Premier League (Manchester City, Liverpool, Chelsea, Manchester United, Tottenham y Arsenal), los organizadores informaron que el torneo quedará suspendido por el momento y señalaron que los clubes ingleses fueron forzados a abandonar por presiones.

A través de un comunicado, dijeron que el actual sistema de competencia definitivamente no funciona, por lo que es necesario hacer un cambio.

"Estamos convencidos de que el status quo del fútbol europeo necesita un cambio y proponemos una nueva competición porque el sistema actual no funciona de forma adecuada. Nuestra propuesta tiene por objeto evolucionar la industria del fútbol y generar valor añadido para toda la pirámide”.

Añadieron que los equipos de la Premier League fueron “obligados a tomar tales decisiones por la presión ejercida sobre ellos”, y pese a ello, se mostraron convencidos de que la propuesta para mejorar el espectáculo futbolístico está apegado a las leyes y normativas europeas.

Por ello, “reconsideraremos los pasos más adecuados para remodelar el proyecto, siempre teniendo en cuenta nuestros objetivos de ofrecer a los aficionados la mejor experiencia posible".

De acuerdo a reportes en España, los clubes de LaLiga, Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid, siguen formando parte de la Superliga, aún con la baja de los clubes británicos.

También se mantendrían los grandes de la Serie A con la Juventus a la cabeza seguidos por el Inter y el Milan, sin embargo, medios italianos han informado en las últimas horas que su situación dentro del proyecto podría dar un giro con su posible salida.

Este sería el caso del Inter, después de que su director general, Beppe Marotta, revelara que “nosotros probablemente saldremos”; el Milan también seguirá el mismo el camino ante la debilidad del proyecto en tan solo 48 horas.

De los clubes de la Serie A, solo la Juventus se mantendría de pie junto al Real Madrid como los impulsores de la Superliga.

Los italianos son creyentes de que su participación en el certamen podría mejorar de forma considerable sus finanzas, las cuales han sido golpeadas por la pandemia del COVID-19.

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