Buscan empresas de carne de ave nuevos mercados potenciales de exportación

Lo anterior lo señaló el Dr. Hugo Fragoso Sánchez, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Establecimientos Tipo Inspección Federal (ANETIF) al dar a conocer el “Diplomado de Comercio Exterior para la Carne de Ave” y destacó que de los Estados Unidos se puede importar materia prima avícola bajo cualquier condición, ya sea crudo, procesado, entero o despiezado y de cualquier especie como pollo, pato, pavo.

Por tal motivo la Fundación Anetif puso a disposición de los empresarios de establecimientos Tipo Inspección Federal (TIF) el diplomado antes mencionado en coordinación con el Instituto tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), bajo el patrocinio de USA Poultry and Egg Export Council (USAPEEC) LatAm y la Illinois Soybean Association, donde participan 10 empresas líderes en el sector de procesamiento y exportación de cárnicos.

“El objetivo es desarrollar capacidades en empresas importadoras y exportadoras de carne de ave para identificar mercados potenciales de exportación de producto procesado en México, creando cultura de exportación entre las plantas de proceso para posicionar a nuestro país como un jugador importante a mediano plazo en los mercados avícolas globales, buscando nuevos destinos, el reconocimiento del estatus sanitario por las naciones compradoras, así como del sistema de inspección de carne de ave de animales nacidos, criados y procesados en territorio mexicano y atrayendo inversión para el proceso de la carne de ave en nuestro país”, señaló Fragoso Sánchez, presidente ejecutivo de ANETIF.

Agregó que las tendencias de consumo de carne de ave se han incrementado de manera importante en el último año.

En el mundo es la proteína de mayor crecimiento y su tendencia es al alza. De acuerdo a datos de la FAO la producción de ave creció de 2016 al 2022 en un 18%, mientras que para el cerdo y la res fue de 5 y 2%, respectivamente.

En Estados Unidos la preferencia del consumo está en la pechuga de pollo, la cual tiene múltiples destinos como las hamburguesas, sandwiches y comidas preparadas, en siguiente posición se encuentra el consumo de alitas, que ha crecido de manera notable desde hace ya varios años, sin embargo, en México el consumo de pierna y muslo ocupa un importante lugar en la dieta del mexicano.

El consumo de carne de pollo en nuestro país ha aumentado de 28 kg per cápita anual en 2011 a alrededor de 35 Kg en 2022, de acuerdo a datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP). Se calcula que cada mexicano consume 2.92 Kg de carne de ave al mes, mientras que de cerdo y res ingiere 1.73 y 1.27 Kg. de carne respectivamente”, precisó Fragoso.