Por Martha Mercado Ramírez
Estamos a menos de 4 meses para la jornada electoral del próximo 6 de junio en la cual habremos de definir, en el ámbito federal, a las personas que integrarán la Cámara de Diputados y, en la esfera local, a la II legislatura del Congreso de la Ciudad de México, 16 alcaldías y 160 concejalías.
En este tiempo de intercampaña, las fuerzas políticas irán definiendo a las personas que las abanderarán para obtener el favor de la ciudadanía en las urnas; las autoridades electorales continuarán emitiendo lineamientos para garantizar la equidad en las contiendas y resolviendo las quejas que vayan surgiendo; mientras que los medios de comunicación, en el marco del Modelo de Comunicación Política, realizarán la cobertura para informar a la gente de las propuestas y cuestiones más relevantes del Proceso Electoral.
Pero en todo lo anterior, el factor predominante de la democracia es la ciudadanía, que será responsable de asistir a las urnas y ejercer su derecho al voto como parte fundamental en la organización de la respectiva jornada.
En nuestro país, las ciudadanas y ciudadanos somos las personas responsables de recibir y contar los votos, construyendo así una democracia que se nutre con la participación de todas y todos, a través de la confianza social en quienes nos rodean.
Con el aprovechamiento y proliferación de las tecnologías de la información y las redes sociales, la ciudadanía se involucra y también se vuelve parte activa en el debate político como agente que exige a las autoridades, candidaturas y partidos, el mejoramiento constante de las políticas y propuestas que han de guiar los rumbos de nuestras comunidades.
De igual forma, en los procesos electorales se resaltan los valores de la ciudadanía. La tolerancia, para tener un debate abierto y respetuoso; la honestidad, para impedir que conductas que infrinjan la ley se lleven a cabo durante éstos; y la participación, pues estamos conscientes que para tener una democracia sólida y estable requerimos de todas y todos.
Esta elección nos permitirá, a través de la reelección, evaluar la gestión de quienes gobiernan, lo que representa una gran oportunidad para la ciudadanía en la búsqueda de propuestas y soluciones que satisfagan sus peticiones y demandas.
Asimismo, considero fundamental que nos mantengamos informados sobre el acontecer del Proceso Electoral 2020-2021, conocer y comparar las propuestas de las candidaturas y, finalmente, reflexionar sobre el mejor camino para nuestras comunidades.
Solo a través del trabajo conjunto entre sociedad, autoridades electorales y gobierno podremos llevar a buen puerto esta etapa del país y, con ello, corregir los errores y fortalecer los aciertos con el fin de construir una mejor democracia en donde todas y todos estemos incluidos y podamos participar en paz, seguridad y libertad.