La Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) decidió, en su más reciente asamblea estatal, mantener el plantón instalado en la Ciudad de México, con el objetivo de exigir la abrogación de la Ley del ISSSTE promulgada en 2007.
Durante el cierre de la asamblea, la secretaria general de la Sección 22, Yenny Aracely Pérez Martínez, enfatizó la importancia de intensificar la movilización en la capital del país, donde actualmente participan cerca de 20 mil docentes. “También asumimos que se tiene que ir fortaleciendo esta jornada de lucha. Si bien estamos más de 20 mil compañeros y compañeras en la Ciudad de México se hace necesario seguir fortaleciendo este gran movimiento, porque nos ha enseñado la historia de lucha que solamente la acción permite avanzar con nuestras demandas”, expresó.
Pérez Martínez criticó al gobierno de la Cuarta Transformación, asegurando que “es más de lo mismo”, al no responder a las demandas del magisterio tras nueve días consecutivos de manifestaciones. Acusó a la presidenta Claudia Sheinbaum de ignorar las protestas. Ante esta situación, planteó la necesidad de reactivar la mesa de diálogo con la Comisión Nacional Única Negociadora.
“Nuestras demandas no son nuevas, no venimos por una semana más de vacaciones, venimos por la abrogación de la Ley del ISSSTE que afecta no sólo a los trabajadores de la educación, afecta a todos los trabajadores del Estado, por eso hacemos el llamado a los demás sindicatos que se sumen, porque lo que está luchando este movimiento de la CNTE va a beneficiar todos los trabajadores del Estado; pero la CNTE es la punta de lanza en esta jornada de lucha 2025”, afirmó.
En un llamado a la unidad, la dirigente sindical también denunció intentos de división al interior del movimiento, atribuidos al gobierno federal. Esto tras ser agredida por un grupo de docentes al salir de una mesa de negociación en la Secretaría de Gobernación. A pesar del incidente, subrayó que “hoy decimos que la Sección 22 está firme y se mantiene unida”.