Por Armando Hernández
De conformidad con lo que dispone el artículo 113 constitucional, el Sistema Nacional Anticorrupción se integra por una instancia nacional, y se articula con los 32 sistemas locales de las entidades federativas.
A la fecha, la Ciudad de México es la única entidad federativa que aún no ha integrado las instancias de su sistema local anticorrupción, debido a que la Suprema Corte de Justicia declaró la invalidez general de la Ley de la materia, expedida en su momento por la entonces Asamblea Legislativa del Distrito Federal, y ello trajo como consecuencia que se tuvieran que desandar los primeros pasos avanzados, entre ellos el nombramiento del Comité de Participación Ciudadana de ese sistema.
La función del CPC es apoyar al cumplimiento de los objetivos del Comité Coordinador, así como ser la instancia de vinculación con la ciudadanía, las organizaciones de la sociedad civil, colegios, barras de profesionistas e instituciones académicas relacionadas con las materias del sistema local, con el objeto de coordinar a las autoridades locales competentes en la prevención, detección y sanción de responsabilidades administrativas y hechos de corrupción.
Para ello, es fundamental la coordinación entre las autoridades de todos los órdenes de gobierno competentes en la prevención, detección y sanción de responsabilidades administrativas y hechos de corrupción, así como en la fiscalización y control de recursos públicos.
Sin duda alguna, la articulación de los Sistemas Locales con el Sistema Nacional Anticorrupción, será un factor indispensable para que existan mejores resultados en su actuación.
Por otro lado, para el mejor éxito en la implementación del SLA de la CDMX, es conveniente tomar en consideración los elementos del estudio de buenas prácticas en la implementación y operación de Sistemas Anticorrupción, emitido por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) en 2019.
De la misma forma, será de gran utilidad la adopción de medidas del modelo preventivo, trabajar en mejorar la ética e integridad en el servicio público, y aplicar la cultura del compliance que se utiliza en el sector privado.
En su implementación, el Sistema Local Anticorrupción enfrentará sin duda diversas inercias institucionales, las cuales habrán de vencerse a través del diálogo, la conciliación, la cultura de paz y cultura de la legalidad, implementadas con criterios sistematizados para establecer metas concretas, viables y evaluables en materia de política transversal anticorrupción, lo que deseablemente será posible a través de la Plataforma Digital de dicho sistema.
Flor de Loto: Es necesario erradicar el cáncer social de la corrupción, que tanto ha afectado al tejido social en nuestro país y nuestra ciudad; a través del uso del conocimiento científico y la metodología propia de las ciencias sociales, en el diseño institucional y la evaluación del desempeño institucional del Sistema Local Anticorrupción.