La lucha política en el Congreso estadounidense por llegar a una solución en el tema migrante llega a límites que podemos ubicarlos en desgracias humanas, en la deshumanización y en temas discursivos alejados de la realidad que viven miles de personas.
Desde hace un par de semanas el arribo a la frontera México-Estados Unidos se ha incrementado drásticamente.
Es tal la situación que se presenta en la ciudad de El Paso, Texas, que el mismo alcalde declaró el sábado por la noche “estado de emergencia”.
El alcalde Oscar Leeser se llamó muy preocupado por estas oleadas humanas… “cientos” están durmiendo en las calles en condiciones inseguras y bajo temperaturas muy frías ya que los albergues han topado su capacidad”.
Con esta declaratoria, esta ciudad fronteriza recibirá una ayuda federal extraordinaria que le permitirá a su administración, contar con recursos adicionales para hacerle frente y brindar algún tipo de ayuda a las personas que están durmiendo a la intemperie cobijadas por algunos cartones a temperaturas que ya descendieron de los cero grados centígrados.
El alcalde Leeser, del partido demócrata, parece haber quedado abandonado al esfuerzo que, de manera única con su equipo de trabajo, pueda realizar por parte del gobierno estatal dirigido por Greg Abbott, representante del partido republicano.
Estas diferencias políticas que se registran en diversos puntos de Texas, realmente a lo largo de los más de 3 mil kilómetros de frontera, mantienen el tema migrante exactamente igual a lo conseguido, por ejemplo: en el gobierno de Clinton, Obama o Trump, por citar algunos.
El alcalde Leeser ha dejado estas diferencias y está actuando a favor de los miles de viajeros que sin documentos intentan ingresar a los Estados Unidos…” queremos que todas estén a salvo, creo que hoy nuestros solicitantes de asilo no están seguros ya que tenemos cientos y cientos en las calles y esa no es la forma en que queremos tratar a las personas”.
Vale mencionar que un número récord de migrantes han cruzado la frontera entre Estados Unidos y México bajo la presidencia de Joe Biden. Sólo la semana pasada los agentes fronterizos procesaron un promedio de 2,400 diarios a lo largo de varias millas de frontera en El Paso, Texas.
Según estimaciones de la propia patrulla fronteriza la afluencia a partir del miércoles será muy elevada, sobre todo, si nos referimos al final del programa “titulo42” que bajo esquemas sanitarios expulsaba a los detenidos migrantes de forma inmediata. Impuesto por Donald Trump.
Este año los migrantes detenidos en esta frontera rondarán los 2 millones 500 mil, cifra antes no registrada y la situación sólo parece que se complicará, basta revisar las condiciones de los países expulsores.
@arnc7