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Continuando con este análisis, es necesario mencionar que, la dualidad existente entre las fuertes inversiones en investigación, desarrollo e implementación de Inteligencias Artificiales Generativas y los efectos que seguramente estará trayendo en las estructuras del empleo; por supuesto quedarán a la vista de todos en el momento en que se aterrice la tecnología a través de la utilización intensiva de aplicaciones en la mayoría de los ámbitos de desempeño y será ahí donde veremos de manera clara y precisa los resultados en el tercer eslabón de la pirámide del crecimiento; es decir, la productividad, que constituye una de las mayores pretensiones y esfuerzos de los inversionistas.
En cuanto a la productividad, Dambisa Moyo coloca como ejemplo un estudio realizado en el año 2023 entre 5,000 trabajadores, que fue elaborado por el economista y académico estadounidense de la Universidad de Stanford Erik Brynjolfsson y un equipo de especialistas; el cual concluyó que las herramientas de inteligencia artificial incrementaron la productividad de los trabajadores en un 14% promedio y en 34% para el caso de los trabajadores nuevos y poco calificados.
Lo anterior, nos lleva inevitablemente a inferir que el aumento de la productividad no tendrá un comportamiento homologado o igual; sino que, dependerá de la conjugación de múltiples factores; que en lo personal me hace considerar la urgente necesidad de realizar los trabajos suficientes y necesarios para que coloquemos el tema productivo en sus justas dimensiones.
En lo particular, no tengo la menor duda de que las Inteligencias Artificiales Generativas han llegado para quedarse y están provocando una disrupción en nuestras vidas; no obstante, no quiero caer en el error, en que considero, se está incurriendo, al magnificarlas; ya que ello desencadena un efecto negativo dentro de la sociedad; debido a que muchos individuos empiezan a verlas como los enemigos a los que estaremos enfrentando.
En abono de lo anterior; no perdamos de vista que como humanidad ya tenemos un largo trecho recorrido en cuanto a descubrimientos e inventos, que se han traducido en la modificación de nuestras formas de vida y ello lo ubicamos desde la creación de utensilios para arar la tierra; la aparición de la máquina de vapor; la electricidad; la electrónica y hasta llegar a nuestros días con las tecnologías emergentes, lo que ha requerido en la mayoría de los casos, de lapsos prolongados que contemplaron el diseño, desarrollo, implementación y estabilización de esas tecnologías disruptivas; por lo que, reitero, no tengo la menor duda de que las Inteligencias Artificiales Generativas modificarán el paradigma productivo actual; sin embargo, es fundamental ir observando el acontecer y tomando acciones por nuestro bienestar.
Por otro lado, el trabajo de Dambisa me ha llevado a la reflexión sobre todos los beneficios que se pueden obtener mediante la correcta utilización de las IA´s. en los diferentes ramos del acontecer social y productivo; pero sobre todo, centro mi atención en lo relacionado al acceso a servicios públicos como la atención médica y la educación, que prevengan y resuelvan enfermedades y faciliten e incrementen el nivel de vida de los ciudadanos; la consecución de la conectividad universal, como el canal para el acceso de todas y todos a la vida cultural, social, económica y política y un crecimiento económico equitativo e incluyente; todo lo anterior deberá contemplar el ingrediente de la democratización social; es decir, que deberán ser parte de él todas y todos los ciudadanos.
Es de reconocer que, la difusión y uso de las tecnologías anteriores; como ya se dijo, requirieron de un determinado tiempo para observar los resultados en cuanto a eficiencia y productividad; en contraposición de ello, las IA´s. hoy pueden permear fácilmente a través de plataformas y dispositivos digitales existentes, lo que es maravilloso pero, en la vertiente de las desventajas están los riesgos de seguridad que conllevan y que hoy en día ya vivimos.
La empresa de auditoría, consultoría y outsourcing PricewaterhouseCoopers (PwC) estima que como resultado del Súper ciclo de la IA, existe la posibilidad de que se den aumentos en la productividad por un monto de 16 Billones de dólares a nivel mundial para 2030; no obstante, como ya se mencionó, las mayores utilidades caerán en los dueños del capital y en menor grado en una clase obrera potencialmente mermada; ante lo cual, los gobiernos deberán desde ahora realizar diagnósticos que los lleven al diseño de políticas públicas de corte fiscal y social que permitan mantener el equilibrio social, económico y político respectivo.
No podría dejarse de observar que si las mayores ganancias van hacia los capitalistas, es evidente que la ecuación fiscal debe modificarse a través de tasas impositivas más altas que sujeten el exceso generado por la automatización y compense una fuerza laboral achicada.
En lo que atañe al bienestar social debe quedar claro que pudiéramos encontrarnos en camino de un desempleo estructural derivado de las IA´s. lo que quizá lleve nuevamente al debate de un concepto con el que no comulgo del todo como lo es la Renta Básica Universal.
Por último, un aspecto ineludible a reflexionar es la desigualdad, que se pudiese generar entre capital y trabajo y en el entorno geopolítico mundial entre los Estados Unidos y China, en relación con el resto del mundo; que no puede ni debe dejarse de lado, de frente al nuevo mundo digital.
YA EN EL CORREDOR:
Habrá que dar una lectura profunda e inteligente a la multa de 90 millones de pesos que aplicó el IFT a Radio Móvil Dipsa (Telcel) por prácticas monopólicas relativas en lo que respecta a los canales de distribución de chips y teléfonos en Colima, Jalisco y Michoacán y digo lo anterior; debido a la próxima y tan esperada resolución Bienal de medidas impuestas al preponderante en el sector de las telecomunicaciones.
Luis Escobar Ramos
Email: lescobarramos67@gmail.com
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