Columnas
La característica principal de los "borregos políticos" consiste en que no saben o no necesitan saber gran cosa, son carne de cañón que se utiliza para los fines que conviene a las élites que los manejan, incluso si esa borregada es de maestros, que se supone deberían estar más "letrados".
Pero en el surrealismo latinoamericano en general y en el mexicano en particular, las sorpresas nunca se terminan.
Desde hace más de 15 días tenemos como secuestradores de la Ciudad de México a un puñado de "letrados" cuyo lema es: "gobierne quien gobierne los derechos se defienden", para desmarcarse de las críticas que señalan que lo mismo que hoy le hacen a la dizque izquierda instalada en el gobierno federal, se lo hicieron a la derecha o a los que se decían del centro.
Simple y llanamente no tienen remedio, no hay forma de justificar lo injustificable y claramente se observa que lo suyo no tiene nada que ver con el "imperialismo" como decían hace años en protestas similares, ni tampoco tiene que ver con la "lucha de Zapata", como tanto pregonan.
Pero al margen de lo anterior, entre sus muchas demandas absurdas piden la derogación del sistema de Afores, que aun con todo lo perfectible que puede ser ha logrado disipar en parte las presiones financieras que hoy serían inaguantables para las finanzas de este país.
En 1997 cuando nació el sistema de las Afores se calculó que el gasto en pensiones con el viejo e ineficiente sistema de reparto equivaldría en forma anual a aproximadamente el 15% del PIB hacia el año 2015, es decir en este momento.
El ahorro actual de los trabajadores en las cuentas individuales que manejan las Afores se ubica en aproximadamente 21% del PIB, algo así como 6.3 billones de pesos, eso quiere decir que hoy el gobierno, es decir la sociedad de este país, tendría que desembolsar año con año alrededor de 4.5 billones de pesos para pagar las pensiones de los trabajadores si no existieran las Afores, ¿De dónde?, decía mi abuelita.
Esos recursos además también serían crecientes, imaginé usted lo que debería ser para el año 2035, el equivalente a una bomba nuclear para las finanzas de este país.
El viejo sistema de reparto además generó pensionados muy mal pagados para decirlo de manera decente, o muertos de hambre para decirlo de manera clara y concisa.
No me lo crea a mi, busque un conocido que se júbilo bajó las reglas del sistema de reparto y pregúntele sobre el monto de su pensión, las más de las veces encontrará usted cifras que son una "grosería", para no decir que son una mentada de madre.
El sistema de reparto, ese que ahora piden los "letrados" que se reinstale, no solo ya fracasó sino además los datos hoy muestran de forma contundente la pertinencia de mantener el sistema actual de las Afores, con todo y sus vicios.
Lástima de letrados, algunas veces no basta con eso, se puede ser letrado pero no por eso se debe llegar a querer rebuznar.