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La vivienda social en la Ciudad de México es un aspecto crucial de la política pública, diseñado para abordar las necesidades habitacionales de la población de bajos ingreso, a continuación, describiré algunos de los aspectos clave de este interesante y muy necesario tema.
La vivienda social en nuestra Ciudad se refiere a las casas o departamentos destinados a personas y familias de bajos ingresos, que no pueden acceder a una vivienda adecuada a través del mercado inmobiliario tradicional, estas viviendas son generalmente financiadas a través de programas específicos, hay tres grandes rubros que definen las viviendas que nos ocupa analizar en esta columna:
• Viviendas de Interés Social: Generalmente son desarrollos habitacionales con viviendas básicas, pero funcionales, destinadas a familias de ingresos bajos y medios.
• Vivienda Progresiva: Un modelo en el que se construye una vivienda básica, pero con la posibilidad de ampliarla y mejorarla con el tiempo.
• Autoconstrucción Asistida: Programas en los que se provee asistencia técnica y financiera a familias para que construyan sus propias viviendas de manera gradual.
Sin embargo, existen desafíos que se deberán tomar en cuenta para dotar a las familias de las 16 alcaldías uno de los derechos fundamentales contemplados en la Carta Magna y en la Constitución Política de la Ciudad de México, …el acceso a una vivienda digna y decorosa…
• Déficit Habitacional: A pesar de los esfuerzos, existe un déficit significativo de viviendas adecuadas, especialmente en zonas rurales y marginadas.
• Calidad de la Construcción: Algunas viviendas sociales han sido criticadas por la baja calidad de los materiales y la falta de servicios básicos adecuados.
• Accesibilidad y Ubicación: Frecuentemente, las viviendas sociales se ubican en áreas periféricas con acceso limitado a servicios, empleo y transporte.
La perspectiva es que la vivienda social a través de nuevas políticas y programas, el gobierno busque no solo reducir el déficit habitacional, sino también mejorar la calidad y accesibilidad de las viviendas, la sostenibilidad y la resiliencia frente a fenómenos climáticos son también consideraciones cada vez más importantes en la construcción de vivienda social.
En resumen, la vivienda social es crucial para mejorar la calidad de vida de millones de mexicanas y mexicanos, proveer una vivienda adecuada contribuye a la estabilidad familiar, la salud, la educación y el desarrollo económico, es un componente vital de las políticas de bienestar, que enfrenta múltiples desafíos, pero que sigue siendo un objetivo prioritario para el desarrollo del país.