Es raro lo que sucede con Mary Elizabeth Winstead. Muchos la recuerdan por su personaje Ramona flowers, en Scott Pilgrim Vs The World, que me atrevo a decir que es su personaje mas icónico, y aunque después de ese filme ha realizado bastantes más, algunos con actuaciones bastante bien logradas por parte de ella, como Smashed, en donde encarna a una joven con problemas de alcohol, no termina por encajar en el imaginario colectivo.
Par su papel en Kate, resulta evidente la preparación física, las escenas intensas de peleas cuerpo a cuerpo lo requieren, en ese sentido es grato cuando una actriz se entrega de lleno al personaje. Desgraciadamente la bomba explosiva que resulta el estreno mensual de Netflix, queda como un juego de niños encontra de otras grandes películas del género de las cuales copia demasiado.
El filme comienza en Osaka, Japón, Kate está por terminar un trabajo como asesina a sueldo, trabajando para una especie de corporación, de la cual sabremos poco durante el filme. El guión base de este tipo de filmes, dicta que algo debe salir mal en la mision, y así es, todo se complica puesto que el objetivo al que debe asesinar se encuentra con una niña, las reglas prohíben disparar a personas con niños presentes, pero el deber es el deber, y nuestra protagonista cumple el suyo.
En menos de veinte minutos se han cumplido casi todos los clichés de estos filmes: un asesino solitario criado desde niño para ese trabajo, que sigue las órdenes y consejos de un mentor retirado y del cual obviamente tendremos que desconfiar avanzada la trama, la casi inmortalidad de nuestro protagonista, que en solitario deberá enfrentarse a una organización con pocos rasguños o heridas superficiales que se curan rápido.
El problema no son los clichés, es lo mal aplicados que están. Nada sorprende el último filme del director Cedric Nycholas, toma elementos de tantos filmes tan descaradamente que hasta para el menos conocedor del tema le provocaran reminicencias a otros tantos como Comando (1985), Ghost in The Shell (1995), john wick (2011), La villana (2017), o incluso a aquella película un tanto olvidada Dead Or alive (1986).
La misión fallida de Kate deviene en un envenenamiento, para el cual no hay cura y sabiendas de esto, buscara venganza a como de lugar, dando paso a las clásicas peleas cuerpo a cuerpo, cuchillos, navajas, pistolas, parkour entre edificios o persecución de autos en la ciudad.
¿Quién la enveneno y por qué? Bueno el fin del filme responde esto ,´pero para nadie es sorpresa, es una historia hemos visto ya tantas veces que se vuelve solo disfrutable para quienes no sean asiduos a las tramas de acción violenta, tan solo por que el factor sorpresa los agarrara desprevenidos.