El VAR tiene tres años en la Liga MX y desde entonces el arbitraje mexicano sigue sin saber utilizarlo, pero durante la última década se ha visto un declive: no hay rigor, personalidad ni carácter; es un servicio que cuesta a cada club más de 90 mil pesos por partido y sólo generan polémica. Están en crisis.
En el futbol mexicano quedaron definidas las semifinales del torneo Guard1anes 2021: Cruz Azul contra Pachuca y Puebla ante Santos Laguna, pero durante este proceso se han desencadenado una serie de errores arbitrales que han generado polémica.
Ayer con Fernando Guerrero, el deporte hizo justicia a los "Tuzos", pues un penal inexistente fue clave para que América estuviera a punto de echar al Pachuca en el Estadio Azteca, donde por cierto, Cruz Azul, también sacó provecho de los infames errores de los silbantes nacionales para instalarse en la ante sala de la Final, pues Fernando Hernández, señaló un penal que definió la eliminación del Toluca y ojo, hubo un video que reveló que el portero Jesús Corona, amenazó al silbante antes del encuentro, perdonándole la expulsión.
El arquero se atrevió a decir en la cara del silbante: "Hoy gana el Fair Play, hoy no va a haber 12 jugadores", para lo que este le contestó: "¿Perdona, nos estás amenazando?". Un hecho lamentable.
El arbitraje de nuestro país atraviesa una crisis tremenda y no es secreto, pues ha sido una década en declive. Arturo Brizio Carter, actual presidente de la Comisión de Árbitros, ha implementado una serie de estrategias para el desarrollo de los silbantes en el futbol mexicano, pero evidentemente sin éxito.
A inicios del año la Federación Mexicana de Fútbol dio a conocer que Enrique Osses, el mejor Árbitro de la Conmebol (2012), instructor FIFA y expresidente de la Comisión de Árbitros de la Federación de Fútbol de Chile; llegaba como nuevo director de instrucción de la Comisión de Árbitros.
Este personaje dio la instrucción a los árbitros mexicanos de acudir menos al VAR, de tener criterio propio, para optimizar la relación humana con la tecnología en este rubro, pero esto se ha convertido en un caos, hay confusión, sensación localista -como en Sudamérica- recientemente algunos penales -principalmente- que no debieron ser.
El penalti con el que América empató 1-1 el partido de Vuelta de Cuartos de Final ante los "Tuzos", no debió ser marcado, algo en lo que coincidieron los exárbitros Felipe Ramos Rizo, Francisco Chacón y Marco Antonio Rodríguez. ¿Qué está pasando con los silbantes mexicanos?
Otra de las señales de crisis, se verá reflejada en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, pues no habrá ningún árbitro central en la rama varonil, reflejo de lo mal que está el arbitraje nacional. ¿Ahora imaginen cómo se verán para la Copa del Mundo Qatar 2022.
En este sentido, se ha dado un paso enorme en femenil, pues Lucila Venegas, árbitra central y ganadora del Premio Nacional de Deportes (PND), dará la cara por México; las asistentes Enedina Caudillo y Mayte Chávez; así como el árbitro VAR, Erick Yair Miranda, completan el equipo que acudirá a Japón.
El arbitraje actual es malísimo. Corrieron a Adalid Maganda, aquel que hizo hasta una huelga por racismo y despido injustificado, argumentando no tener la capacidad para pitar un juego, pero el resto de los silbantes no se queda atrás. Se extraña el carácter de un Bonifacio Núñez, la personalidad de Armando Archundia, la sapiencia de "Chiqui Marco", el temple de Felipe Ramos Rizo, etc.
Urge personalidad, carácter y rigor en el arbitraje mexicano.