El Manchester City se llevó un merecido triunfo 2-1 en su visita al Real Madrid por la ida de los octavos de final de la Champions League.
El estadio Santiago Bernabéu enmudeció en la parte final del encuentro, cuando el City mostró toda su eficacia para dar vuelta el resultado tras quedar en desventaja en la segunda parte.
Los “Merengues”, que habían sufrido durante largos pasajes del partido, abrieron el marcador a los 59 minutos, cuando Isco conectó de primera un pase de Vinicius en una jugada que se inició con un grosero error de la defensa del City cerca de la mitad de la cancha.
Pero las cosas cambiaron radicalmente en la última media hora de juego, cuando el City finalmente pudo traducir en la red el peligro que había creado.
El elenco de Pep Guardiola igualó al 78, cuando Gabriel Jesús marcó de cabeza y superó la débil resistencia de Thibaut Courtois, que hasta ese momento había tenido una actuación perfecta.
A los 83 el belga Kevin De Bruyne puso el 2-1 de tiro penal. Y las cosas empeoraron más para el Madrid a los 86, cuando Sergio Ramos fue expulsado por una falta en el borde del área sobre Gabriel Jesús tras un mal pase de Casemiro a Raphael Varane.
"No mantuvimos la intensidad los últimos quince minutos y nos echamos para atrás. Llegaron dos veces y marcaron. Esto no ha acabado pero tenemos trabajo”, dijo Casemiro.
Por su parte, Guardiola se mostró feliz por el triunfo pero cauto.
"En el Bernabéu tienes que sufrir. Concedimos el gol cuando mejor estábamos y marcamos cuando mejor estaban ellos, esta competición es así. Si un equipo puede darle la vuelta a una eliminatoria es el Real Madrid".
Con información e imagen de Reuters.