Las encuestas se han convertido casi en la “palabra” que dicta a los gobernantes y políticos la manera en que deben proceder, normalmente siempre se hacen a ciudadanos con respecto a si están o no conformes con la forma de gobernar, pero hoy salió una que llamó poderosamente mi atención, una consulta al personal médico y administrativo en los hospitales que están enfrentando el Covid-19 y los resultados son reveladores: el presidente Andrés Manuel López Obrador sólo cuenta con 38 por ciento de aprobación entre especialistas, enfermeras, personal técnico y administrativo que cree, además, los dejará solo si llegaran a contagiarse como ha sucedido con compañeros que han fallecido por la pandemia.
La directora de Enkoll, Heidi Sousa, explicó que se dieron a la tarea de localizar a 800 personas del sector salud, principalmente del IMSS, para preguntarles su sentir siendo ellos los que están en la primera línea en la guerra contra el coronavirus y más de 60 por ciento no cree en los informes dados a conocer diariamente por el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, lo cual significa lo que muchos temíamos: cifras maquilladas.
Doctoras, doctores, enfermeras, camilleros y personal administrativo piensa que la información respecto a contagios y decesos es mucho más alta de la que nos informan a los ciudadanos, es decir, 70 por ciento de los encuestados aseguran que las cifras son mucho más altas a las reportadas.
Los encuestados, hombres y mujeres que, pese al peligro de contagiarse y morir, siguen el pie del cañón desmienten lo dicho por el propio López-Gatell y el director del IMSS, Zoé Robledo, de que están totalmente protegidos, siguen padeciendo de equipo especializado y 82 por ciento de ellos sostuvieron que no han visto ventiladores nuevos como asegura el gobierno federal.
El personal que atiende a los enfermos de Covid-19 en diferentes hospitales de la zona conurbada reconoce tener miedo de contagiarse porque, además, piensan que en dado caso serán abandonados por las autoridades de Salud como ha sucedido con algunos de los compañeros que ya fallecieron.
Con respecto a la aprobación del director del IMSS, Zoé Robledo, sólo 40 por ciento del personal que labora en esa institución lo aprueba, mientras que 51 por ciento lo desaprueba.
No hay mucha diferencia con el director de Prestaciones Médicas del IMSS, Víctor Hugo Borja, tiene un nivel de rechazo de 47 por ciento, lo cual significa que en la opinión de los galenos y personal técnico y administrativo este señor se preocupa más por quedar bien con su jefe que con el personal que diariamente se pelea con la muerte de los hospitales del Seguro Social.
En cuanto a agresiones a sus personas sólo 25 por ciento dice haber sido víctima de familiares que tienen algún enfermo hospitalizado.