Teóricos del consumo y de la psicología social aún carecen de un consenso sobre cuantos puntos son los indicados y más atractivos para el ojo de una potencial víctima, perdón, cliente. Hay quienes manejan un listado de siete o de nueve, y los clásicos que siempre defenderán los famosos Top 5 y el Top 10.
En esa tónica, desde hace tres semanas las preguntas son frecuentes y hasta repetitivas: ¿cómo ves la situación? ¿cuánto durará? ¿cómo quedará el país? ¿de verdad se podrá fea la cosa? Y las respuestas llegan de todas partes, son multidisciplinarias y desde diferentes escenarios de interpretación, lo cierto es que los analistas y economistas, si al dinero o a los negocios nos referimos confluyen en un tema: “Hay que cuidar los ingresos, ahorrar y anticipar la peor de las crisis”.
Por eso, hoy les comparto algunos de los consejos que los instruidos en la materia ponen en la mesa para vivir y enfrentar la crisis derivada de la pandemia Covid-19. Y los resumo como los clásicos, aquí las diez respuestas para darle batalla a la emergencia sanitaria con nuestros ingresos.
1.- Junta familiar para unir fuerzas y poner en la mesa los ingresos y gastos de todos los habitantes de una casa. Si la disposición oficial publicada el 31 de marzo pasado fue #Quédate en casa las necesidades cambian. Se reducen los gastos de transporte, comidas fuera y otros derivados del trabajo fuera de casa, y aumentan otros: consumo de luz, agua, gas y despensa (sin incluir los adicionales resultado de una situación médica).
2.- Enlistar los ingresos mensuales por salarios, honorarios, pensiones y otros que sean fijos. La suma de esos recursos es conveniente dividirla: 50 por ciento para necesidades básicas; 30 por ciento para gastos personales o comprometidos, incluido pago de deudas, y 20 por ciento para ahorrar.
3.- El mejor momento para ahorrar es el home office. En casa los Godinez que van al Oxxo o a la tiendita desaparecieron, así que tu gasto hormiga de café y antojitos desaparecen. El gasto en el transporte y la hora de comida también. Así que se recomienda hacer una lista y guardar el dinero como si se gastara todavía. Para muchos ese será el ahorro que podrán hacer, porque el resto del ingreso se sigue aplicando para deudas, pagos y sustento.
4.- Contraria la máxima del que “no arriesga no gana”, en esta ocasión los economistas muestran cautela para sugerir negocios a largo plazo. La duración de la crisis es incierta y será histórica.
5.- Mantener créditos a tasa fija es lo mejor, no busque encontrarse con la tasa variable por muy atractiva que hoy esté, el mañana puede ser negativo.
6.- Revisar vigencia de seguros de vida, médicos o de desempleo que se tengan. Leer las letras chiquitas sobre limitantes, primas y deducibles. Recuerda que si tienes algún crédito hipotecario o automotriz seguro te adjuntaron un seguro, no lo olvides y en caso de necesidad puede sumar.
7.- Si se tiene la certeza de conservar el empleo o los ingresos, es momento de invertir en bienes. Las hipotecas tendrán que bajar para conservar el negocio.
8.- No entre en pánico y busque vender bienes, éstos son para resolver problemas si, pero no para malbaratar. No ayude a especular comprando dólares, nunca ha sido buena inversión.
9.- Pagar y consumir con ayuda de instrumentos digitales. Le ahorrarán tiempo y riesgos.
10.- Sin falta escribir el diario de la crisis. Registrar entradas y salidas, y saldos. Cruda realidad, pero necesaria.