Son cuatro y no tres los presidenciables de Morena

Hasta éste momento- el presidente López Obrador sólo ha nombrado- en las últimas conferencias matutinas el nombre de tres posibles aspirantes para la contienda interna de Morena en vísperas del proceso electoral del 2024.

Si bien el poder o la influencia que tiene el presidente en las mañaneras es muy poderosa en términos mediáticos, no puede ignorar el perfil de Ricardo Monreal en esa lista de presidenciables. A pesar de que ha sido injusto no mencionarlo, es la propia historia, la lógica y la carrera política del coordinador de los senadores de Morena- que lo sitúan en el primer plano, incluso muy, pero muy encima de todos los que esbozó el mandatario federal.

Nadie puede cuestionar la carrera política de Marcelo Ebrard o la propia formación académica de Claudia Sheinbaum. Sin embargo, si hacemos una comparación, lo que ha logrado el senador Ricardo Monreal durante su trayectoria es, políticamente, impresionante.

Respecto al trabajo o labor política, Ricardo Monreal se forjó en la lucha participativa y democrática del país. Su grandes virtudes fueron demostradas, incluso, en momentos de adversidad donde ganó la propia gubernatura de Zacatecas aun y con el sistema o aparato estatal en su contra. Su ejemplar papel fue modelo de persistencia que, hoy en día, es indispensable para alcanzar la cima de quienes están preparados para los retos mayúsculos del país.

Fue tres veces diputado Federal y dos Senador de la República; asimismo, gobernador de Zacatecas y alcalde de la delegación Cuauhtémoc. No fue jefe de la Ciudad de México porque se atravesó una decisión unilateral injusta. Él siempre fue el favorito, incluso lo documentó previamente un número importante de encuestas de renombre.

Pienso, por otro lado, que la carrera política de Claudia Sheinbaum ha sido más producto del respaldo del presidente López Obrador. Repito, no cuestionó su capacidad académica, pero como política- no considero que sea su momento para enfrentar un el desafió del 2024. De hecho, se benefició de una “encuesta” en 2018 por cierto, muy cuestionada ya que hay razones suficientes para pensar, como lo mencioné en el fragmento de arriba, que se decidió con una determinación unilateral, y no con el verdadero pulso de la población civil.

En lo que respecta a Marcelo Ebrard y Adán Augusto, siguen estando allí, en las crónicas de la mañanera. Tienen el respaldo del mandatario, pero no sé si de la militancia de Morena. Aunque se han beneficiado de la mención que hizo el presidente, tendrán que medirse al poder político de Ricardo Monreal que no es sencillo de doblegar por lo que representa la capacidad del zacatecano.

Entonces, son cuatro y no tres los aspirantes. Sus nombres son: Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal, Claudia Sheinbaum y Adán Augusto. De ellos saldrá el candidato de Morena para encarar el reto de refrendar el poder de la Cuarta Transformación. Por tal motivo, la experiencia y la sabiduría puede ser, sin duda, el punto coyuntural que marque la diferencia.

Si bien todos pueden participar, el único que considero altamente competente es, por mucho, Ricardo Monreal.

De hecho, el propio presidente ha reconocido su potencial y su aportación a la lucha democrática del país. Lo ha llamado precursor de la 4T. Bien merecido. Con esa premisa, el mandatario tiene que aceptar que, en esa lista de presidenciables, está Ricardo Monreal.

Si en algún momento lo hace, será un reconocimiento democrático y justo; si no, de todos modos las misma historia y la población civil lo ven con buenos ojos en esa lista de cuatro competidores, y lo colocan en el plano de competencia interna a fin de buscar la silla presidencial

Al final de cuentas, el poder del pueblo que son quienes toman las determinaciones, quieren en la competencia interna a Ricardo Monreal. Luchar a la buena. Esa es democracia y, también, es la esencia de Morena.

Por eso y por muchas cosas, son cuatro y no tres los presidenciables de Morena