Las fuertes lluvias que azotaron la alcaldía Coyoacán el pasado lunes 16 de septiembre llevaron a la suspensión de clases presenciales en la Universidad Rosario Castellanos, luego de que la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil activara la alerta roja en la zona debido a las condiciones meteorológicas.
La universidad, que cuenta con siete planteles en la Ciudad de México, tomó la decisión de cerrar temporalmente sus instalaciones "hasta que Protección Civil realice las revisiones necesarias para garantizar la seguridad", según confirmó un oficial de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) que se encontraba custodiando el plantel de Coyoacán.
Si bien no se registraron inundaciones dentro de las instalaciones de la universidad ubicada en San Eleuterio, en la colonia Pedregal de Santa Úrsula, las autoridades prefieren esperar el dictamen de Protección Civil antes de reabrir las puertas a los estudiantes. En un comunicado publicado en su cuenta de X, la universidad informó que las clases se impartirían de manera virtual el martes 17 de septiembre como medida preventiva.
A pesar de la suspensión de actividades presenciales, algunos docentes y personal de limpieza accedieron al plantel durante el día para recoger pertenencias y materiales de trabajo. El área exterior presentaba algunos daños menores, como ramas caídas y una lona del acceso principal deteriorada, aunque las instalaciones internas se encontraban en buen estado.
Por otro lado, las canchas del deportivo adyacente a la universidad aún presentaban encharcamientos tras las lluvias, aunque no se reportaron mayores afectaciones.
Este miércoles, la Unidad de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la alcaldía Coyoacán, en conjunto con su director Jorge Peña, ofreció asistencia a Alma Herrera Márquez, directora de la Universidad Rosario Castellanos, para llevar a cabo la inspección de las instalaciones. Sin embargo, Herrera señaló que se espera la revisión de parte de la propia universidad antes de requerir apoyo adicional.
La directora agradeció el ofrecimiento de la alcaldía y aseguró que, en caso de ser necesario, solicitarían la intervención de Protección Civil para asegurar un regreso seguro a las aulas, dado que en mucho tiempo no se había registrado una tormenta de tal magnitud en la zona.