Ucrania insta a Polonia a "castigar" a agricultores que tiraron granos en protesta

AFP

Ucrania pidió a Polonia que "castigue" a los agricultores polacos que durante una protesta abrieron por la fuerza camiones ucranianos y esparcieron cargamentos de grano en las carreteras de la frontera.

Los agricultores comenzaron una movilización en la frontera la semana pasada y bloquearon tres pasos en protesta por las importaciones de granos ucranianos, que consideran como competencia desleal por sus bajos precios.

Estos incidentes son un nuevo golpe para las relaciones entre Ucrania y Polonia, unas semanas después de que el gobierno de Varsovia logró aplacar una protesta similar de los camioneros, que sostuvieron una movilización que duró dos meses.

El dirigente del gremio de los camioneros polacos que lideró el bloqueo, Rafal Mekler, dijo que estuvo en la frontera el lunes y que apoya la protesta de los agricultores.

Los transportistas polacos, que buscan que la UE restablezca las restricciones de entrada para sus competidores de Ucrania, prometieron que reanudarán el bloqueo de la frontera, si no se satisfacen sus demandas.

La UE suspendió los permisos de entrada para los camioneros ucranianos como un gesto de solidaridad con Kiev, después de la invasión rusa en febrero de 2022.

El Ministerio de Agricultura de Ucraniano condenó enérgicamente la "destrucción deliberada de grano ucraniano por los manifestantes polacos".

"Esperamos que los culpables sean identificados rápidamente y castigados", agregó.

Las autoridades polacas indicaron que abrieron una investigación por "violación de la seguridad aduanera y destrucción de propiedad".

Los productos agrícolas diseminados "probablemente no serán aptos para su uso", declaró a AFP la portavoz de la Fiscalía de Lublin, Agnieszka Kepka.

La invasión rusa fue un embate para el sector agrícola de Ucrania, un país que era conocido como "el granero de Europa", y que ahora sufre el bloqueo de sus puertos de exportación en el mar Negro y la dificultad de cultivar en medio de una guerra.

Estas protestas son otro obstáculo para el nuevo gobierno polaco del primer ministro Donald Tusk, que desde que asumió en diciembre de 2023 ha tratado de enmendar los lazos con Ucrania, deteriorados durante el anterior gobierno de derecha.