“El cierre de librerías ha sido traumático, pero continuaremos”

martha.rojas@contrareplica.mx

Al inicio de la crisis sanitaria en España, la Federación de Cámaras del Libro calculó pérdidas por hasta mil millones de euros entre marzo y abril, debido a la cuarentena por el coronavirus (Covid-19). A pesar de que la vida en el país ibérico comienza a recuperar la normalidad, las facetas de descofinamiento agravan la situación de las librerías y de los sellos editoriales.

Enrique Redel, director editorial de Impedimenta, fundada en 2007, calcula que las pérdidas han llegado hasta 70 por ciento con respecto al año anterior, pese a las estrategias de comunicación y consumo que conglomerados más grandes han diseñado para impulsar la venta de libros online.

“El tema del cierre de las librerías ha sido traumático a pesar de que existen ventas online o del esfuerzo que libreros realizan para entregar encargos. En Impedimenta hemos estado muy activos, incluso se han hecho peticiones para que el gobierno de España implemente políticas públicas de compra de libros para las bibliotecas y que se realicen campañas para que las personas vuelvan a las librerías y sea seguro. En estos días algunos optaron por encargar libros y pasar a recogerlos a las librerías. Nosotros regresaremos en junio con nuestra primera novedad”, contó Redel en entrevista telefónica a ContraRéplica desde Madrid, España.

Aunque no hay datos certeros acerca de cuánto perderá el sector a causa del coronavirus, el editor considera que es relevante conservar, en la cadena de la industria editorial, el trato cercano y respetuoso con el lector por lo que la editorial fundada en 2007 por Redel aspira a convertirse en una casa de catálogo con lectores militantes que ante la tragedia prefieran los libros.

Un compromiso que pareciera más moral que comercial, puesto que Redel cree firmemente en que la labor de un editor es asegurarse de que en las librerías siempre haya autores que tengan algo que decir.

“Los grandes grupos editoriales hicieron una gran labor comercial para intentar salvar el confinamiento con grandes campañas de consumo, pero el éxito, creo, no ha sido el esperado. La venta bajó 70 por ciento a comparación del año anterior. Nosotros hemos estado en contacto con libreros y algunos aprecian que no hayamos vendido libros porque esa política de plata inmediata puede ser peligrosa, así que preferimos parar y preparar el regreso. Exige cierto músculo financiero, pero continuaremos”, agregó.

TALLER DE NUEVOS CLÁSICOS

Impedimenta define su labor editorial como un compromiso para publicar lo más valioso de la literatura clásica y moderna. Su catálogo está integrado por joyas de la literatura 
occidental y apuesta a la publicación de nuevos clásicos.

“La primera vez que leí Pedro Páramo o 2066 fue un impacto. Supe que se hacía literatura genuina y con Cărtărescu me pasó igual. Lo había conocido por un libro publicado y luego coincidí con Mariana Ochoa, que lo edita en español. Al principio nadie lo conocía y lo trajimos poco a poco a España, cuando ganó el Premio Fomentor, hace casi tres años viajó a México y ofreció una charla en el Péndulo de Polanco, pasó dos horas y media firmando libros. Eso demuestra que es un autor que ha creado una legión de lectores”, abundó.

El escritor y crítico literario rumano Mircea Cărtărescu publicó bajo el sello Impedimenta sus obras Solenoide, Las bellas extranjeras y Nostalgia y entre las novedades con las que regresará el sello se encuentra El cuerpo de la trilogía Cegador, un compendio literario que Redel compara a una mariposa y del que ésta entrega sería la parte medular.

El verano en que mi madre tuvo los ojos verdes, de la también Rumana Tatiana Tibuleac; Monjas y soldados, de Iris Murdoch; Damas asesinas de Tori Telfer son algunas de las novedades editoriales que próximamente llegarán a México.