Por Onel Ortíz Fragoso
@onelortiz
¿Por qué una parte del Grupo Parlamentario del PAN en el Senado se reunió con Santiago Abascal, dirigente de VOX, el partido de la ultra derecha española? ¿Por qué esas senadoras y senadores firmaron la Carta de Madrid? ¿Conocerán las propuestas y posiciones racistas, clasistas, homofóbicas y fascistas de VOX y de su dirigente?
Es claro que las y los legisladores panistas que firmaron la Carta de Madrid sabían quien es Santiago Abascal. Lucen muy sonrientes y “orgullosos” al lado del líder de la extrema derecha española y del sacerdote de los Legionarios de Cristo que los acompaña; es decir coinciden y comparten las banderas racistas, clasistas y homofóbicas de VOX.
Tienen el derecho constitucional de hacerlo. En México existe libertad de expresión y de reunión. Mientras las manifestaciones sean pacíficas, las senadoras y senadores panistas, como cualquier persona, pueden expresar y reunirse con quienes deseen y expresar las ideas que quieran. Lo que no podrían hacer es financiar o patrocinar a VOX con recursos del Senado, pero esa es otra historia que tendría que aclararse en los sótanos del Paseo de la Reforma.
¡Fuera mascaras! Es positivo que la sociedad conozca la línea de pensamiento y acción de los firmantes panistas de la Carta de Madrid.
¿Todo el PAN comparte esta postura? No. De inmediato Xóchitl Gálvez, Gustavo Madero, Adriana Dávila y otros panistas se deslindaron, abriendo una polémica en el contexto del cambio de dirección en la que Marko Cortés busca reelegirse como presidente nacional del PAN. Un partido que desde hace tiempo perdió el poder y el rumbo. Esto pasa cuando la oposición y el gobierno deciden jugar a la polarización. ¿Urge una definición clara del panismo respecto a la extrema derecha española?
El PAN tiene una orientación de centro derecha, donde recientemente pesan más los intereses y el dinero, que la ideología. Pese a todo, en este momento, es la principal oposición política al Presidente López Obrador. El 1º septiembre, Jorge Romero, coordinador del PAN en Diputados, en la sesión de Congreso General, marcó en que sí y en que no, sus grupos podrían ir con el Presidente. Abrió una pequeña ventana a la construcción de acuerdos. Lastima, después de la visita de Abascal al Senado se confirma que en política las palabras se escriben sobre el agua.
El país necesita una oposición de derecha responsable. Capaz de presentar propuestas y alternativas a la sociedad. Un oposición con capacidad de autocritica, no sólo instalada en el rencor, “tuiteando” odio y deseando el fracaso del gobierno.
¿Por cierto, qué hará el PRD ante esta definición de senadores panistas? ¿Es tanta su sumisión al PAN que no puede alzar la voz? La política es de bronce. Eso pienso yo, ¿usted qué opina?