Por: Claudia Bolaños
Este lunes se realizó la reinauguración del Recinto Parlamentario de Palacio Nacional, por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Resalta que en el evento estuvieron presentes tres de los presidenciables, también llamados por el propio titular del Ejecutivo como "corcholatas": Claudia Sheinbaum Pardo, Adán Augusto López y Marcelo Ebrard Casaubon.
Esta reinauguración sería la segunda de ese recinto, pero ahora como espacio museístico que honra la memoria de los Constituyentes de 1857, con diversos símbolos e imágenes de influencia masónica que muestran la importancia que tuvo esta logia en la vida política de México.
López Obrador también estuvo acompañado de su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller; la presidenta del Senado de la República, Olga Sánchez Cordero, y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna.
Entre los invitados estuvieron el secretario de Gobernación, Adán Augusto López; el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard; y la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
También otros funcionarios del gabinete legal y ampliado, estuvieron en la reinauguración.
Fue la senadora Sánchez Cordero quien dio un mensaje en el que recordó que el recinto destruido por un incendio en 1872, y honra la memoria de los constituyentes.
En ese Recinto Parlamentario se discutió y juró la Constitución de 1857, un par de placas recuerdan este suceso a los visitantes.
Sánchez Cordero comentó que López Obrador está consumando la Cuarta Transformación de la vida pública del país, y la democracia depende de la relación entre los poderes públicos.
"La salud de la democracia depende hoy, en gran medida, de la intensa, benéfica y respetuosa relación entre los poderes públicos. Debemos apostar por la colaboración entre los poderes y las instituciones del estado mexicano, aprendiendo precisamente de esas generaciones del siglo XIX en las que las disputas y divisiones propiciaron las grandes catástrofes de nuestro país. Es tiempo de seguir dando pasos en el desarrollo de nuestras instituciones, pasos que garanticen no tener retrocesos en la progresividad de los derechos y la justicia social", dijo.
El salón cuenta con diversos símbolos e imágenes de influencia masónica que muestran la importancia que tuvo en la vida política de México en el siglo XIX, ya que atestiguó importantes episodios históricos como la discusión y juramento de la Constitución de 1857.