La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, condenó enérgicamente la agresión perpetrada por dos servidores públicos contra una comerciante en la Alameda Central. El incidente, ocurrido este domingo alrededor del mediodía, fue captado en video y difundido en redes sociales, mostrando a los funcionarios golpeando a la vendedora hasta dejarla inconsciente, luego de que esta enfrentara al personal de la alcaldía arrojándoles tierra de la alameda.
Brugada enfatizó que "nada justifica la violencia" y subrayó la obligación de los servidores públicos de actuar con estricto apego a los derechos humanos y la ley. Instruyó a la Secretaría de Gobierno y a la Secretaría de Seguridad Ciudadana a realizar una investigación inmediata para deslindar responsabilidades y presentar a los agresores ante la autoridad ministerial.
Horas después, la mandataria informó que los dos presuntos agresores fueron detenidos y puestos a disposición del Ministerio Público. La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México ha iniciado las investigaciones correspondientes para determinar la situación jurídica de los detenidos.
El secretario de Gobierno, César Cravioto, calificó el acto como "reprobable" y aseguró que no se tolerarán este tipo de conductas por parte de funcionarios. Reiteró el compromiso del gobierno capitalino de no solapar acciones violentas y de garantizar el pleno respeto a los derechos humanos de todos los habitantes de la ciudad.
Este incidente se suma a una serie de enfrentamientos recientes entre autoridades y comerciantes en la Alameda Central. El pasado 27 de enero, se registró un enfrentamiento entre vendedores ambulantes y policías durante un operativo de desalojo en la misma zona, resultando en la detención de tres personas.
La jefa de Gobierno reiteró su compromiso de mantener el orden en los espacios públicos mediante el diálogo, buscando evitar confrontaciones y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.
La comerciante agredida, identificada como Donají, recibió atención médica y, aunque fue dada de alta, decidió permanecer en observación por voluntad propia. La comunidad y diversas organizaciones han expresado su indignación por los hechos, exigiendo justicia y medidas para prevenir futuros abusos por parte de servidores públicos.
Foto por Cuarto Oscuro